Como madre mexicana que soy me preocupan muchas cosas con relación a mis hijas. No temo de la tecnología que hace el mundo complejo ni temo de las libertades sexuales que el buen juicio sabe racionar, tampoco temo de sustancias o adicciones que, de nuevo, el adecuado manejo de la libertad elige por prudencia o arriesga como aventura. Y no temo de nada de esto porque la educación oportuna, la comunicación constante y el respeto a la libertad individual son armas eficaces que creo haber establecido en tiempo oportuno y de forma permanente.

Temo, eso sí a múltiples escenarios y circunstancias que atentan contra el bienestar que sueño para mí, mis hijas, y compatriotas. No hablo de la patria como entelequia ideal sino como real residencia. En principio comenzaré por la situación de salud. No importa el cuento que nos cuenten, en el país y los tiempos de mis hijas, una pandemia que no está ni aplanada ni domada es el pan nuestro de cada día. Sus escalofriantes cifras normalizadas (esto es otra gran preocupación) son fugitivas. A medida que tecleo alguien muere en este país, enfermo, aislado y solo, maltratado por un sistema de salud corrupto e ineficiente y, por si fuera poco, culpado por su dieta, por sus hábitos y hasta genética. Eso si no hasta mal diagnosticado, escondiendo con intención la marca vergonzante de su padecer. Los datos oficiales del 29 de agosto de 2020 fueron:

Casos confirmados: 591,712
Casos confirmados en las últimas 24 horas: 5,974
Fallecidos: 63,819
Fallecidos en las últimas 24 horas: 673
Casos sospechosos: 84,310

Mientras Financial Times nos dice que:

“América Latina es el epicentro actual de la pandemia, y la región representa casi la mitad de todas las muertes diarias. Esto ha sido impulsado por un aumento en las muertes por Covid-19 en Brasil, México y varios otros países de América Central y del Sur.[1]

Y menciona dos estudio, uno realizado por los investigadores Mario Romero y Laurianne Despeghel que muestra al menos 3.5 veces más muertes en la Ciudad de México que los datos oficiales, 22 mil 705 muertes solo en la capital. Y otro por el profesor Raúl Rojas, “..que calculó que México podría tener hasta 6 millones de casos y casi 78 mil muertes, casi tres veces el recuento oficial”.

De esto se desprende que temo por la salud de mis hijas y su bienestar, desde luego por el mío propio; como madre lamento que constaten que el gobierno de su país les miente, les oculta datos, se desentiende de su población y la niega; encima, en caso de enfermar, es posible que no pudiera atenderlas o murieran a menos que paguemos un hospital privado (88.57% de los fallecimientos se han registrado en unidades de salud pública, por eso mucha gente prefiere morir en casa). De llegar al hospital y ser aceptadas, sería probable que se ocultara el padecimiento y/o se nos responsabilizara del contagio, como han hecho con toda la población (aunque tomamos pocos refrescos) puesto que el mandatario[2] y su gente viven en una campaña constante para no abandonar el poder que sólo usan en su beneficio.

SAN CRISTÓBAL DE LAS CASAS, CHIAPAS, 14AGOSTO2020.- Después de 45 días de estar desaparecido, Dylan el menor de dos años se reencuentra con su madre y familiares. FOTO: ISABEL MATEOS /CUARTOSCURO.COM

Este gobierno nos pide a las madres que los ayudemos con nuestros hijos “Porque las madres son muy buenas, están llenas de sentimiento; las madres que quieren mucho a los hijos, y nunca una madre va a aceptar que un hijo comete un ilícito” ¿Y qué nos da a cambio? Malas estrategias que no previenen la muerte de la pandemia[3], incremento en la violencia de género[4]; mayor inseguridad y violencia en el país[5]; desempleo; la peor crisis económica desde 1932 (dicho por su propio secretario de Hacienda)[6]; nos hacen temer que el país de nuestros hijos se contamine con el retorno al uso de energías sucias[7]; atenta contra la libertad de expresión[8]; agrava los problemas en lugar de resolverlos[9]; acusa de corrupción con una mano y con la otra la practica con impunidad e hipocresía[10]; hablan de enjuiciar a ex presidentes desde el cómodo fuero, como Penélope por un lado tejen y por el otro destejen filtrando los hilos por aquí y por allá[11]; vuelve a los enemigos amigo y viceversa[12], de acuerdo a la conveniencia; enaltece la megalomanía de un solo hombre practicando un servilismo atroz[13].

Como madre me esfuerzo por enseñar a mis hijas ética, practicar los valores y a descubrir sus talentos, les hablo de las luchas emprendidas en lo global y en lo doméstico por la libertad, la igualdad, la seguridad y la fraternidad ¿Cómo puedo entonces hablarles de la justicia y la igualdad cuando su propio gobierno es clara muestra de descrédito e irrespeto por la legalidad[14] y por nuestra historia[15]; de la seguridad cuando los índices de violencia crecen cada día; de la fraternidad cuando se impulsa la división social desde la presidencia; donde se les muestra la mentira sistemática como herramienta; la hipocresía rampante[16]; la manipulación vergonzosa; la corrupción hipócrita[17]; la ingratitud institucional y electoral que les dio crédito; la más nula autocrítica; la cínica corrupción y el violento autoritarismo; la indiferencia criminal para los enfermos, ya sea de COVID o de cáncer; el ninguneo a la educación y la profesionalización; la sordera ante las mujeres, los indocumentados y los pobres (no los que ellos señalan de “buenos” esos que se adhieren ciegamente a sus mandatos); la traición y el olvido a causas y promesas; la contradicción constante entre los hechos y la realidad; el despilfarro en programas clientelares y el desamparo ante la contingencia?

Dirá un gran amigo que soy una ingenua y vaya que lo soy, soy una madre mexicana, y no me averguenzo, prefiero ser ingenua a aplaudir con cinismo la “genialidad y el pragmatismo político” atributos que han hecho que se piense que la política es deporte de ladrones; que nos está llevado de una dicta blanda detestable a una dictadura retrógrada y atróz. ¿Genialidad o perversidad?

Cómo les explico a mis hijas que más que un presidente lo que tienen es un hábil lengua larga que embauca contando malas ficciones (para un pueblo desesperado que busca la devoció por encima de la civilidad) imputando sin datos, manipulando otros, esos que él tiene porque los inventa. Un hábil propagandista que ha vivido de limosnas, un predicador moralino que no es moral porque mira la paja en el ojo ajeno y esconde cualquier viga que hay en el suyo, narcisista obsesivo de la popularidad que su gabinete solapa. Fabricante de calumnias que se apodera de los personajes de la historia como si fueran emblemas Disney, y con sus vidas justifica sus pecados como si fueran milagros propios de santos. Nada de eso quisiera que aprendieran mis hijas.

No hay mañanera que valga cuando los índices acusan “otros datos”:

Vida y salud: https://www.numbeo.com/health-care/rankings_by_country.jsp?title=2020-mid&displayColumn=0
Violencia e inseguridad: http://visionofhumanity.org/app/uploads/2020/06/ESP-MPI-2020-web.pdf
Legalidad y corrupción: https://www.transparency.org/en/countries/mexico
Equidad y defensa de las minorías: https://bit.ly/3jxCw2p
Protección del ambiente: El regreso al carbón es clara muestra del desinterés, junto con los gastos excesivos en las refinerías y Pemex
Defensa de la libertad de expresión: Falta de respuesta ante la violencia y asesinato de periodistas, constante descrédito, intolerancia,e incluso ofensas a periodistas críticos a la postura oficial.
Corrupción: https://www.eleconomista.com.mx/politica/Casos-de-corrupcion-en-la-Cuarta-Transformacion-20200830-0001.html. Por un lado, somos el país 130 de 180 países en el Informe de Percepción de Corrupción de Transparencia Internacional, por otro, en el Barómetro Global de Corrupción, uno de cada tres mexicanos reconoció haber tenido que pagar un sobornos para trámite gubernamentales. Y por último, la Encuesta Nacional

Golpe de realidad

No sólo siento miedo, me causa tristeza y desilusión el atraso que representa un gobierno estacionado en la venganza, ciego ante el dolor y obsesionado por el poder. Nada de eso quiero enseñar a mis hijas. Sin embargo, ellas y yo sabemos que la realidad termina por imponerse, que como en la estructura del cuento moderno según Hemingway, se cuentan dos historias: una aparente y otra que subyace bajo las aguas como un iceberg, en un punto del decurso los discurso chocan como lo hizo el Titanic, la verdad subterránea surge de sorpresa en lo que llamamos epifanía, no seremos la excepción, pero esta revelación no está siendo mística sino triste y la pagaremos todos, creyentes y no creyentes.

[1] https://www.ft.com/content/a2901ce8-5eb7-4633-b89c-cbdf5b386938 La traducción es mía

[2] No volveré a decir su nombre, no me importa si es marca registrada o no, me resulta ya un nombre vació

[3] https://www.bbc.com/mundo/noticias-america-latina-53778836

[4] https://es.insightcrime.org/noticias/analisis/mapa-de-feminicidios-muestra-patrones-complejos-de-violencia-en-mexico/

https://es.insightcrime.org/noticias/analisis/mapa-de-feminicidios-muestra-patrones-complejos-de-violencia-en-mexico/

[5] https://www.forbes.com.mx/noticias-mexico-vive-de-luto-35000-muertes-entre-violencia-y-covid-19-en-2020/

[6] https://www.jornada.com.mx/ultimas/politica/2020/08/29/en-2021-mexico-vivira-la-crisis-mas-fuerte-desde-1932-arturo-herrera-1376.html

[7] https://elpais.com/internacional/2019/03/27/mexico/1553708640_976805.html

[8] https://aristeguinoticias.com/2208/mexico/sancion-a-nexos-mecanismo-de-censura-indirecta-articulo-19-fundar-y-cmdpdh/

[9] https://www.oilandgasmagazine.com.mx/huachicol-de-gas-sube-122-en-primer-trimestre-del-2020/

[10] https://www.telemundo40.com/noticias/mexico/videoescandalos-en-mexico-ahora-es-el-hermano-de-amlo-el-que-recibe-dinero/2065418/

[11] https://vanguardia.com.mx/articulo/conversando-caso-lozoya-se-ha-comprometido-tras-revelar-datos-de-pruebas