jueves 28 marzo 2024

Respuesta del director

por Marco Levario Turcott

Cuando supe de la demanda de La Jornada contra Letras Libres, por los motivos que son públicos, pensé en ti, Gustavo, y así te lo solicité, para que escribieras al respecto. Agradezco que hayas aceptado, porque tú mismo fuiste blanco de diatribas por parte de ese diario, que ahora, en su litigio, pretende cuestionar el derecho a criticar los contenidos informativos y las definiciones editoriales de los medios de comunicación.

Aquel era, y para mí lo es aún, el tema principal. Sin embargo, en tu texto noté la tensión inherente a “los señalamientos públicos” -que son, desde mi parecer, acusaciones públicas- y el procesamiento legal a que éstos pudieran y/o debieran conducir. Respeto tu decisión de no acudir a los cauces formales, y al mismo tiempo creo pertinente destacar que, en el marco del Estado de Derecho, el capitán Luis de la Barreda fue absuelto de cualquier responsabilidad y que, más aún, quienes lo acusaron sin pruebas hubieran recibido las sanciones correspondientes. Me parece básico que el lector cuente con todos los elementos posibles para tener una opinión, y esto es de siempre, lo sabes: cuando tú fuiste injuriado por La Jornada, etcétera ofreció tu punto de vista y, por cierto, expresó su opinión en favor tuyo.

No sé quién quiera “borrar” los “testimonios” sobre la supuesta responsabilidad del capitán De la Barreda; lo que sí te aseguro, Gustavo, es que aquí, en etcétera, publicamos los tuyos, tanto los de tu texto anterior como los de ahora que reseña tu carta. Por último, conozco los escritos que me remitiste y también las respuestas que tuvieron. En ese tiempo yo expresé mi postura en favor de la defensa que de su padre hizo su hijo Luis, y por ello celebré, y aún lo hago junto a él, la antedicha resolución. Estoy seguro de que el tribunal mediático sólo puede ser acotado o encausado a través de las normas y las leyes.

Un abrazo también para ti.

Marco Levario Turcott

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