viernes 29 marzo 2024

El futuro de la relación entre medios y poder

por Rubén Aguilar Valenzuela

A continuación propongo diez temas que ahora pueden parecer utópicos pero, pienso, irán tomando lugar en la agenda pública y en la particular de la relación entre medios y poder, en la medida que pasen los años. Su dinámica está asociada con la maduración y perfeccionamiento de la democracia mexicana, que sin duda tendrá lugar en el horizonte de los próximos 20 años.

La relación entre los medios y el poder está caracterizada por el nivel de desarrollo democrático de una sociedad. De manera general se puede plantear, siempre hay excepciones, que a menor democracia mayor control del poder sobre los medios y a mayor democracia más espacio de libertad de acción de los medios.

El gasto de los gobiernos, para publicitar sus acciones en los medios y la dependencia de éstos de la venta de publicidad al gobierno, para poder sostenerse, es expresión de un estadio primero de la democracia. En las más desarrolladas los recursos públicos, los que aporta el público vía los impuestos, son para financiar las obras públicas y no para que el gobierno se publicite y los medios se enriquezcan.

En el caso de México, no es el único, buena parte de la relación entre el poder y los medios está mediada por la relación comercial que se establece entre ambos. Si los gobiernos pagan espacios publicitarios, aunque no siempre estén a la vista, reciben un tipo de trato y otro si no lo hacen.

La cobertura noticiosa de los medios, siempre hay excepciones, queda, entonces, condicionada por el pago de la publicidad de los distintos órdenes de gobierno, pero también participan, en menor proporción, los otros poderes del Estado.

En el futuro, en la medida que maduren y se perfeccionen la vida e instituciones democráticas del país, la relación de los medios y el poder en México no va a depender de sus acuerdos comerciales sino de la información que los órdenes de gobierno y los poderes del Estado generen y de la capacidad crítico-profesional de los medios.

Diez temas a considerar

1) Las democracias tienden a parecerse y en todos loscampos, la mexicana irá dando pasos para asemejarse en términos legales y formas de operar a las de ya larga monta.

2) Los actores sociales deben asumir esta realidad y verse reflejados en lo que ocurre en esas democracias. No hay otra posibilidad. Es un hecho irreversible por sí mismo, pero todavía más por nuestra vecindad con Estados Unidos.

3) La relación entre medios y poder no va a ser la excepción. Unos y otros deben ver adelante, por un lado, y verse, por otro, en el espejo de cómo opera esta relación en las democracias más desarrolladas.

4) En los próximos tres o cuatro sexenios (entre 18 y 24 años) los distintos órdenes de gobierno y los otros poderes del Estado, siguiendo las normas de las democracias más desarrolladas, se verán obligados por ley, a no anunciarse en ningún medio.

5) Lo anterior, que tarde o temprano va a ocurrir, implica, a cambio, que el gobierno federal tenga que “liberalizar” todos o muy buena parte de los tiempos de Estado que ahora goza en la radio y la televisión.

6) En esta dinámica, que es la propia de la democracia, los propietarios de los medios deberían adelantarse a lo que algún día habrá de suceder teniendo como referente la realidad de los medios en las democracias más desarrolladas.

7) Los medios privados deben reorganizar su estructura financiera ante la posibilidad de que México asuma los estándares de las democracias más desarrolladas y los gobiernos y poderes del Estado ya no sean anunciantes.

8) Tampoco debe dejarse de lado que en los próximos tres o cuatro sexenios (entre 18 y 24 años) madure la idea de construir, como ocurre en Europa, un sistema de radio y televisión de Estado, no de gobierno, tan competitivo como los privados.

9) La acción organizada y concertada del sector, aglutinado en la Cámara Nacional de la Industria de la Radio y la Televisión (CIRT) puede, si se lo proponen, atrasar los plazos de la llegada de los nuevos tiempos, pero no van a detener la historia.

10) El sector, teniendo como referencia modelos de las sociedades democráticas más desarrolladas, podría adelantarse a los tiempos haciendo propuestas que le convenga, y le generen simpatía en la sociedad. Esa es su mejor posibilidad.

A manera de conclusión

Que por ley se impida el uso de los recursos públicos para la contratación de publicidad en medios, pienso va a suceder en el país porque todas las democracias tienden a parecerse. De manera arbitraria, pienso que éste proceso pueda concluir en los próximos 18 ó 24 años, que implican tres o cuatro sexenios. Se puede también considerar, es una posibilidad, que la democracia mexicana sea la excepción y nada de esto suceda, pero también que los tiempos se aceleren.

Es un tema distinto que el gobierno esté obligado al apoyo, con fondos públicos, a medios y publicaciones culturales, científicas y comunitarias que resulten de interés público. Se tendría que hacer en el marco de una reglamentación precisa y transparente. Es un tema que requiere una amplia discusión y el gobierno y estos medios deberían verse en el espejo de las sociedades democráticas más desarrolladas, para derivar los posibles modelos de relación.

Ya como presidente electo, Enrique Peña Nieto, se comprometió a crear un consejo ciudadano que tuviera la responsabilidad de conocer de la compra de tiempos en radio y televisión por parte del gobierno federal y también los gobiernos estatales y municipales. Un grupo del equipo de transición trabajó en esta propuesta, pero hasta ahora el gobierno no ha dicho nada sobre cómo hará realidad éste compromiso.

También te puede interesar