viernes 29 marzo 2024

Vietnam y el coronavirus

por María Cristina Rosas

Vietnam es un país asiático localizado en la península de Indochina. Tiene una población de 96 208 984 habitantes. Con un producto interno bruto (PIB) de 1 043 mil millones (billones) de dólares, es la 23ª economía a nivel mundial y posee un ingreso per cápita de 10 755 dólares -medido en términos del poder adquisitivo. Vietnam ocupa la 117ª posición en los índices de desarrollo humano del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) con un desarrollo alto. Figura en el 67° lugar -en un listado de 141 países- en el índice de competitividad global del Foro Económico Mundial correspondiente a 2019.[1] En el índice de libertad económica de la Fundación Heritage, Vietnam se encuentra en la 90ª posición.[2] En el índice de percepción de la corrupción de Transparency International, el país asiático se ubicó en el 104° lugar, empatado con Kosovo, Tailandia, Albania, Côte d’Ivoire y Argelia entre 198 naciones en 2020[3]. En el índice de paz global de 2020, Vietnam está en el 50° lugar en un listado de 163 países.[4] En el índice de seguridad en salud global está en el 50° lugar entre 195 países.[5]

FILE PHOTO: A family wears protective masks as they ride a motorbike in the street amid the coronavirus disease (COVID-19) outbreak in Hanoi, Vietnam, January 29, 2021. REUTERS/Thanh Hue

En la mitología, el pueblo viet surge de la unión entre un dragón y un hada del que nacieron cien hijos que son quienes poblaron el territorio. Viet es el nombre que reciben los habitantes del sur de la República Popular China (RP China) y Vietnam y nam es equivalente a sur. Por lo tanto, Vietnam hace alusión a los viet del sur. La China continental, Francia y EEUU históricamente han buscado el dominio sobre este estratégico territorio ubicado en el sureste asiático y que colinda al norte con la RP China, al oeste con Laos y Camboya, al este y al sur con el Mar Oriental o Mar del Sur de China.

El territorio reside en la parte oriental de la península de Indochina en la que se asientan franjas montañosas, llanuras y deltas. El país tiene forma de “S”, es ancho en el norte y el sur y estrecho en el centro. Tiene una extensión de 331 210 kilómetros cuadrados, equivalentes a la sexta parte de la República Mexicana y alberga, como se comentaba en el párrafo precedente a una población de 96 208 984 habitantes. Por lo tanto, la densidad demográfica es de 295 personas por kilómetro cuadrado.

El país es una república marxista-leninista unitaria y monopartidista. Su Presidente es Nguyen Xuan Phuc y el Primer Ministro es Pham Minh Chinh. Es uno de los dos países socialistas en el sureste de Asia -Laos es el otro- pero, al igual que ocurre con la RP China, las autoridades han privilegiado una suerte de “socialismo de mercado” donde la economía opera conforme a las reglas del libre mercado capitalista.

Entre 179 a. C y 939 d. C se produjo la dominación china que llevó al territorio el budismo, el taoísmo y el confucionismo. Sin embargo, los dominados no aceptaron la asimilación y tras una larga lucha, obtuvieron su independencia la cual se prolongó casi por mil años, de 939 a 1858. En ese tiempo se consolidó la identidad viet y la unificación del norte y el sur. Ello no significa que no existieran pugnas por el poder, una de las más relevantes la encabezada por la dinastía Nguyen, que en su afán por mantener el dominio se alió a Francia, la que deseaba controlar Indochina por su relevancia comercial. En 1859 Francia tomó Saigón y finalmente se impuso en 1883. El dominio francés impulsó su lengua, su gastronomía y su cultura ante la que los viet de nuevamente se resistieron. Así, tras el debilitamiento francés con motivo de la segunda guerra mundial, De Gaulle decidió abandonar Vietnam en 1954.

Con el retiro francés, el país quedó dividido en dos: el norte comunista y el sur capitalista. En el norte gobernaba Ho Chi Min y en el sur Bao Dai. El segundo se había comprometido a convocar a elecciones dos años después de la salida de Francia pero no sólo no cumplió sino que, apoyado por las naciones occidentales, estableció una dictadura que buscaba frenar el avance del comunismo en el país. La lucha entre el norte y el sur derivó en que las grandes potencias de inmiscuyeran en la contienda y Estados Unidos decidiera invadir el territorio de 1959 hasta la firma del Tratado de París de 1975. La guerra de Vietnam fue costosa en vidas humanas y civiles, en términos ambientales -dado el ecocidio realizado por los estadunidenses empleando armas incendiaras y otras más que devastaron los ecosistemas del país asiático- en los soldados del país invasor, y en el prestigio de Estados Unidos, país fuertemente criticado en todo el mundo por las atrocidades perpetradas en una nación vulnerable.

Tras la derrota y el retiro de Estados Unidos, comenzó otra vez el camino a la unificación, la cual enfrentó numerosos obstáculos, uno de los principales, la conversión de la economía del sur a un sistema de planificación central no capitalista. Políticamente también hubo resistencia, por lo que las autoridades desarrollaron una fuerte represión. La economía colapsó prácticamente hacia 1980 pero el pragmatismo de los gobernantes, que observaron las reformas efectuadas tanto en la RP China como en la Unión Soviética y Europa Oriental, determinó cambios económicos, una suerte de perestroika en la que se llevaron a cabo iniciativas que privilegiaron el desarrollo manufacturero, la reforma al sector agrícola y el fomento del turismo. El gráfico 1 muestra las impresionantes tasas de crecimiento económico mostradas por Vietnam en la década más reciente, incluso presentando un respetable crecimiento en 2020 del 2. 91 por ciento, el año de la pandemia del SARSCoV2, agente causal del COVID-19. Si bien la agricultura sigue siendo importante al representar el 15. 3 por ciento del PIB, el sector manufacturero con una participación del 33. 3 por ciento y, sobre todo, el sector terciario con un 51 por ciento, dan cuenta de la transición económica experimentada por el territorio. De hecho, si bien la agricultura emplea al 38. 6 por ciento de la población económicamente activa, el sector manufacturero es responsable del 26. 7 por ciento y el de los servicios del 34. 7 por ciento.[6]

Gráfico 1

Producto interno bruto de Vietnam entre 2011 y 2020

Fuente: Agencia Vietnamita de Noticias.

Situación demográfica y epidemiológica

Vietnam es un país culturalmente diverso que cuenta con 54 grupos étnicos reconocidos de los que 53 son considerados minorías. El grupo étnico dominante es el viet o kinh mismo que representa al 85 por ciento de la población total. Los pueblos indígenas equivalen a 13. 4 millones de personas o bien el 14. 6 por ciento del total de la población. El gobierno de Vietnam no emplea el concepto de “pueblos indígenas” sino que aplica “minorías étnicas” en su lugar. A todas las etnias se les reconoce la ciudadanía vietnamita y la igualdad de derechos, si bien enfrentan desigualdades como la pobreza y la distribución desigual de tierras.[7]

Gráfico 2

Vietnam: pirámide demográfica en 2020

Fuente: Naciones Unidas.

En el gráfico 2 se puede observar la pirámide demográfica del país. Tiene una amplitud en los rangos de edad de 10 a 34 años y a partir de ahí se empieza a estrechar. El país tiene una tasa de fertilidad de 2 hijos por mujer, cercana a la requerida para el reemplazo demográfico. El gráfico 3 muestra asimismo el declive de los nacimientos, que en 1960 eran de 6. 34 hijos por mujer. Empero, se trata de un país con población joven.

Existe una diáspora vietnamita en el mundo de alrededor de 4. 5 millones de personas. Más de 2 millones de ellos residen en EEUU. Otros países receptores importantes son Camboya -entre 400 mil y un millón-; Japón -450 mil-; Francia -400 mil-; Taiwán -320 mil-, y Australia -300 mil-, entre los principales. El Ministerio de Asuntos Exteriores de Vietnam explica que actualmente las principales razones para emigrar son las laborales; llevar a cabo estudios; el matrimonio; amén del tráfico ilícito de personas, en especial de mujeres y niños con fines de explotación sexual.[8] Los vietnamitas que laboran en el exterior son una importante fuente de ingresos para Vietnam que en 2020 recibió remesas por 17. 2 mil millones de dólares lo que lo convirtió en el tercer país asiático como captador de remesas en ese año. Las remesas equivalen al 5 por ciento del PIB.

La esperanza de vida de los vietnamitas es de 75. 4 años (datos de 2019), lo que también revela un aumento significativo desde 1960 cuando se ubicaba en 59. 03 años, sin dejar de lado el estancamiento demográfico que se generó con motivo de la guerra de Vietnam en la que se estima murieron entre 2. 5 y 3 millones de personas -si bien hay quienes colocan estas cifras por debajo y por encima.[9]

La mortalidad infantil ha decrecido de manera significativa al pasar, en 1960, de 56. 4 infantes por cada 1 000 nacidos vivos a 15. 9 en 2019, aunque esta cifra sigue siendo alta cuando se le compara no sólo con los países desarrollados sino con países de la región como Malasia (7. 3 infantes muertos por cada 1 000 nacidos vivos); Tailandia (7. 7); y Singapur (2. 1).

El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) en un análisis sobre la situación de los niños vietnamitas explica que tras la guerra que desarrolló Estados Unidos se produjo un fuerte crecimiento demográfico. Como se puede observar en el gráfico 6, entre 1960 y 2020, el país triplicó su población al pasar de 32 670 048 a 96 208 984 habitantes. Mayor población significa más demanda de servicios los que, a menudo no tienen una distribución equitativa en el país. Asimismo, Vietnam es proclive a padecer fenómenos naturales de corte hidrometeorológico y terremotos, lo que produce damnificados y desplazados y plantea desafíos al crecimiento económico y el bienestar social.[10]

En Vietnam coexisten las enfermedades crónico-degenerativas no transmisibles con las enfermedades infecciosas. La principal causa de defunción en el país (cifras de 2017) son las enfermedades cardiovasculares, seguidas, de lejos, por diversos tipos de cáncer, en tanto las enfermedades respiratorias y digestivas ocupan la tercera y cuarta posiciones. La tuberculosis es la quinta causa de defunción, muy cerca de los accidentes de tránsito y la demencia. En octavo sitio se ubican las enfermedades del hígado, seguidas de las enfermedades del tracto respiratorio inferior y la diabetes mellitus.


Al igual que en otros países asiáticos, el consumo de tabaco es muy alto en el país y Vietnam se encuentra entre los 15 que más productos de ese tipo consume la población. El tabaquismo contribuye al desarrollo de cánceres que, como se puede apreciar en el cuadro 1, son la segunda causa de defunciones. Como se observa en el gráfico 7, hacia 2015 el tabaquismo era responsable de 100 muertes por día. El 50 por ciento de los hombres y el 5 por ciento de las mujeres consumen productos de tabaco.[11]Fuente: Statista.

En Vietnam existe la práctica, de largo arraigo en Asia meridional de mascar tabaco. Si bien el mayor consumidor de tabaco de esas características es India, en Vietnam existe el thouc lao o nicotina rústica, también conocida como tabaco salvaje que se fuma en una pipa hecha de bambú. Este tabaco es tan fuerte que su principal uso es como pesticida. Sin embargo, existe la práctica de que, tras ingerir alimentos, se fume, presumiblemente porque tiene propiedades digestivas. Muchas personas vomitan y se desmayan -sobre todo extranjeros- tras fumar el tabaco salvaje debido a la fuerte carga de nicotina que ingresa al torrente sanguíneo.[12] La Organización Mundial de la Salud (OMS) advierte que este tipo de tabaco y el mascado tienen más posibilidades de generar cáncer bucal.[13]

Gráfico 7

Los accidentes de tránsito son frecuentes y constituyen la sexta causa de defunción en el país a razón de un deceso cada hora. En 2019 se registraron 17 mil accidentes cifra menor a la reportada en 2017 en el cuadro 1. Las causas de estos siniestros son múltiples e incluyen malas señalizaciones, vehículos averiados en plena vialidad, imprudencia de conductores de vehículos, bicicletas y motocicletas. La población es eminentemente rural con sólo 4 de cada 10 vietnamitas asentados en ciudades o zonas urbanas, lo que remite a falta de infraestructura de vías terrestres de comunicación aderezado esto con una topografía accidentada y diversa. Los accidentes por impactos con ganado son frecuentes. El estado de las carreteras es deficiente en todo el país y en época de lluvias son frecuentes las inundaciones, lo que dificulta el tránsito.

Vietnam tiene la tercera mayor tasa de consumo de alcohol en el continente asiático. Entre 2011 y 2015 el consumo de alcohol en hombres de 24 a 64 años pasó de 69. 6 a 80. 3 por ciento. El consumo de bebidas con una graduación de 15 o más grados de volumen de alcohol es frecuente y se le asocia al desarrollo de diversas patologías cómo cánceres de hígado, colon, mama, estómago y boca.[14] El consumo de alcohol también es responsable de accidentes vehiculares.

La cerveza constituye el 94 por ciento del total del alcohol consumido en el país y tiene un potencial de crecimiento gracias a la mejora en la calidad de vida y la urbanización, donde la ingesta de esta bebida es mucho mayor que en las zonas rurales.[15] El reto es entonces mejorar la legislación y los controles en los puntos de comercialización, al igual que las penalizaciones por venta a menores de edad.

El sistema de salud en Vietnam

En general existen principalmente cuatro sistemas de salud en el mundo, a saber:

  • El mutualista o bismarckiano, basado en cotizaciones como fuente principal de financiamiento, que se basa en las aportaciones obligatorias del trabajador y de la empresa en la que labora para su solvencia. Este sistema prevalece actualmente en Alemania y también en Austria, Países Bajos, Bélgica, Luxemburgo y Japón.[16] Al modelo bismarckiano también se le conoce como modelo de los seguros sociales.[17]
  • El modelo Beveridge. Este sistema nació en 1942, en plena segunda guerra mundial de la mano de Lord William Beveridge, en el cual el Estado se hace cargo del financiamiento del sistema de salud unificando el sistema de seguridad social bajo su égida, a través de impuestos. Este modelo también se aplica en Francia -donde Pierre Laroque encabezó los esfuerzos para brindar protección social a la población, de manera que en 1946 se creó el sistema nacional de seguridad social-,[18] Suecia, Dinamarca, España e Italia, entre otros.
  • El liberal, cuyo principal representante es Estados Unidos. Conforme a sus premisas, la salud es un bien de consumo donde son las libres fuerzas del mercado las que distribuyen los recursos sanitarios a la sociedad. El Estado no tiene la responsabilidad de promover la salud y su participación es marginal, dirigiendo su atención sobre todo a grupos desfavorecidos o carentes de recursos. El usuario paga directamente al proveedor o bien, lo hace a través de compañías privadas de seguros. Si bien el modelo favorece la competitividad entre los proveedores y da libertad a la sociedad de elegir al de su preferencia, cubre de manera imperfecta el aprovisionamiento de servicios de salud, dejando fuera numerosos padecimientos y también a diversos sectores de la población, incluso a aquellos que cuentan con un seguro privado.
  • El socialista, del que subsisten ya muy pocos ejemplos, siendo Corea del Norte y sobre todo Cuba, sus máximos exponentes. En este modelo el financiamiento corre por cuenta del Estado e incluye a la totalidad de la población. Por lo tanto, tiene cobertura universal y gratuita. Las ventajas son evidentes: se apuesta por la medicina preventiva y la educación y alfabetización sanitarias para elevar la salud de la población. Con todo es un sistema rígido y burocrático.[19]

El sistema de salud en Vietnam tiene elementos del modelo bismarckiano, toda vez que es una mezcla o híbrido entre el sector púbico y el privado. Sus antecedentes se remontan a 1989 cuando se desarrollaron programas piloto de seguro médico en algunas provincias. Para 1992 se amplió la cobertura a trabajadores formales y pensionados. En 1995 se introdujo una tarjeta para el otorgamiento de servicios médicos a la población de escasos recursos. En 2002 se creó un fondo de cuidados médicos para la población en situación de pobreza. En 2005 se introdujeron seguros obligatorios y voluntarios. En 2009 se promulgó la ley de seguridad en salud que cubre a las personas en situación de pobreza, a quienes se acercan a la línea de pobreza y al sector informal. En 2015 se estableció el objetivo de dar cobertura universal a la población, mismo que fue refrendado en 2020.

Estas reformas han posibilitado que al día de hoy 87. 7 por ciento de la población está cubierta por algún seguro médico. El 97 por ciento de los infantes son inmunizados y la tasa de mortalidad materna se ha reducido en un 75 por ciento desde 1990.[20]

El sistema público de salud está organizado de manera jerárquica e incluye el nivel central administrado por el Ministerio de Salud y los niveles locales bajo autoridad provincial y municipal. Existen cuatro niveles para el aprovisionamiento de servicios de salud, a saber: el central -con hospitales centrales y regionales e institutos de investigación- que dependen directamente del Ministerio de Salud; los niveles provinciales y distritales; los niveles comunitarios y en la base una red de trabajadores de la salud en las aldeas quienes realizan llamadas y visitas locales. Como se explicaba, el país es mayormente rural y tiene 54 comunidades indígenas de las que 53 son consideradas minorías y que representan el 14. 6 por ciento de la población. La inmensa mayoría de estos grupos se asienta en zonas montañosas o en las tierras altas del centro del país en las fronteras con la RP China, Camboya y Laos y proporcionar servicios de salud a todos ellos es un reto mayúsculo.[21]

El sistema de salud vietnamita enfrenta varios desafíos, siendo uno de los principales la equidad y la oferta de servicios de calidad en las comunidades más remotas. A menudo, las personas no realizan visitas a los centros de salud locales y se trasladan a las grandes ciudades para recibir atención médica, lo que resulta costoso no sólo para ellas, sino para el sistema en su conjunto. En este sentido la mejora de la atención primaria de la salud que descargue la presión que enfrentan los grandes hospitales de las zonas urbanas es imperiosa. Aquí también es menester modificar las percepciones de los habitantes quienes requieren educación/alfabetización en salud para confiar en que recibirán diagnósticos y tratamientos correctos ante los padecimientos que enfrenten en las localidades en que residen.[22]

Los grandes centros urbanos en Vietnam son la ciudad Ho Chih Minh -antiguo Saigón- con casi 9 millones de habitantes y la capital Hanoi con 8 millones de habitantes. Ambas son las urbes más densamente pobladas sobre las que recaen migraciones rurales que buscan el acceso a servicios médicos de calidad.

La mala salud de la población como resultado del tabaquismo, del alcoholismo y de la contaminación ambiental, demanda un esfuerzo de parte de las autoridades para generar conciencia en los habitantes. Como se puede observar en el gráfico 12, el gasto en salud como porcentaje del PIB ha oscilado entre el 4. 57 por ciento y el 6. 33 por ciento que son sus puntos más bajo y alto entre 2000 y 2018. Se tiene una proporción baja de médicos por cada 1 000 habitantes -0. 82 en 2016- al igual que de personal de enfermería -1. 44 en el mismo año. Muchos médicos emigran a otros países a efecto de mejorar sus percepciones salariales y ante las condiciones de saturación y demanda y expectativas profesionales limitadas que enfrentan en Vietnam.

En la década pasada, las autoridades del país pusieron en marcha un programa para construir centros hospitalarios y reducir así la carga que enfrenta el sistema de salud pública. Asimismo, se ha buscado incrementar el número de camas de hospital por cada 1 000 habitantes que en 2014 era de 2. 6 lo que en diversos momentos llevó a que 3 o 4 pacientes tuvieran que compartir la misma cama en los nosocomios.[23]

El gasto en salud per cápita ha crecido entre 2000 y 2018 al pasar de 18. 91 dólares de EEUU a 151. 68 dólares. Sin embargo, es bajo. El gasto de bolsillo en salud es de los más altos del mundo, representando, según el Banco Mundial, el 68. 1 del presupuesto total en salud y ello se explica porque, ante la saturación de los hospitales públicos, las personas tienen que buscar el acceso a servicios médicos privados, que a menudo deben sufragar con sus propios recursos. Ello tiene efectos catastróficos en la calidad de vida de los vietnamitas.

Para resolver este problema, las autoridades de Hanoi han apostado a la generación de un mecanismo de alianzas entre el sector público, el privado, fundaciones filantrópicas y la asistencia oficial al desarrollo (AOD) que permita mejorar la infraestructura, el acceso a tecnología de punta, la cobertura y la formación y retención de los recursos humanos requeridos en el sector salud.[24]

El país alberga a una cantidad importante de institutos de investigación científica que tienen vinculación con investigadores en todo el mundo para ampliar la capacidad de monitoreo y combate de enfermedades como la tuberculosis, el VIH/SIDA y la gripe aviar, además de que hay una intensa colaboración con instituciones médicas estadunidenses.[25]

Vietnam y el coronavirus

Vietnam tiene límites territoriales con la RP China y, por lo tanto, está expuesto a que las epidemias que afloran en ese país se reproduzcan rápidamente en el territorio vietnamita. La epidemia provocada por el SARSCoV de 2002-2003 hizo de Vietnam el segundo país más afectado a nivel mundial. El primer caso de SARSCoV2 en Vietnam se registró el 23 de enero de 2020 y correspondió a una persona que regresó al país procedente de Wuhan. En marzo y agosto de 2020, el país experimentó una segunda y tercera olas de la enfermedad. A finales de 2020, se habían registrado 1 445 casos y sólo 35 defunciones lo cual generó admiración de parte de la comunidad internacional. Empero, en el momento de escribir estas líneas (30 de agosto de 2021), tras olas sucesivas de nuevas cepas, el país tiene 449 889 casos y 11 064 defunciones. ¿Qué sucedió?

La experiencia del SARSCoV y los brotes de gripe aviar han llevado a las autoridades a desarrollar estrategias de prevención en materia de salud pública. Claramente y como se ha explicado en líneas precedentes, el sistema de salud tiene numerosas deficiencias y no cuenta con la capacidad para responder en un escenario de contagios y enfermos graves en grandes cantidades, mucho menos de cara a una situación pandémica. Con todo, si bien las cifras del 30 de agosto son muy superiores a las registradas el año pasado, existen fortalezas que Vietnam posee para hacer frente a la pandemia del SARSCoV2.

Tras la llegada de la enfermedad al país en enero de 2020, las autoridades gubernamentales decretaron el cierre de las fronteras. Ello implicó la prohibición de todos los viajes al exterior y la reubicación de todos los pasajeros que llegaran a instalaciones militares para guardar una cuarentena, incluyendo a ciudadanos y extranjeros. El rastreo de casos probables fue escrupuloso y ello se logró a través del trabajo coordinado entre estudiantes de medicina, trabajadores del sector salud, las fuerzas armadas y organizaciones afiliadas al partido comunista amén de que se emplearon las redes sociales para reforzar las medidas aplicadas y también para contrarrestar la desinformación.[26]

Es de destacar que, a diferencia de otros países, Vietnam no condujo pruebas masivas para la detección de la enfermedad. De hecho, al mantener la pandemia bajo control se dio el lujo, especialmente en 2020, de manufacturar una serie de insumos médicos que exportó a Estados Unidos. Con todo, hoy enfrenta un reto mayúsculo. Desde abril del presente año se produjo un auge exponencial de contagios. Se culpa al ingreso de chinos que cruzan ilegalmente la frontera, al igual que a viajeros procedentes del exterior por esta nueva crisis, también alimentada por la contagiosa variante delta. Las autoridades han decretado ante el aumento de casos y defunciones, una cuarentena obligatoria ya no de 14 sino de 21 días tras arribar al país, además de que las autoridades locales están aplicando penalizaciones contra quienes no porten el cubrebocas, no respeten la distancia física y no desarrollen las medidas de higiene básicas. Asimismo, se han incrementado las multas por difundir noticias falsas.[27]

Si bien el impacto económico ha sido severo en el país, las empresas turísticas han estimulado el turismo local. Asimismo, Vietnam se ha beneficiado de las sanciones impuestas a la RP China por Estados Unidos, de manera que diversas empresas han optado por reubicarse en el territorio indochino, lo cual genera expectativas de crecimiento económico, a pesar de todo.[28] Las autoridades han mantenido políticas macroeconómicas que generan certidumbre y el sector privado ha estado mayormente de acuerdo con las políticas de combate de la enfermedad desarrolladas por los gobernantes.[29]

Las autoridades de salud han elaborado un plan para lograr la inmunidad de rebaño en 2022. Como ha ocurrido en gran parte del mundo, hay grupos prioritarios para recibir la inmunización comenzando por el personal de salud y los adultos de 65 o más años. Vietnam confía en recibir en el presente año 100 millones de dosis de vacunas de las que 38. 9 millones provendrán del mecanismo COVAX; 30 millones de AstraZeneca; y 31 millones de Pfizer BioNtech. La primera vacuna aprobada por el gobierno fue la de AstraZeneca a principios de 2021. El 23 de marzo la rusa Sputnik V fue igualmente autorizada para uso de emergencia llegando a un acuerdo con Moscú el pasado 2 de junio, para adquirir 20 millones de dosis. El 4 de junio, las autoridades vietnamitas acordaron la adquisición de la vacuna de Sinopharm para uso de emergencia y se aseguró un embarque de medio millón de dosis el 20 de junio y que primordialmente serían aplicadas a chinos viviendo en Vietnam, vietnamitas estudiando o trabajando en la RP China y personas que residen en zonas fronterizas. El 13 de junio se anunció que la vacuna de Pfizer BioNtech también había sido aprobada para uso de emergencia. El 15 de julio la vacuna de Johnson & Johnson recibió el mismo status que las anteriores. La vacuna de Moderna se espera sea fabricada en España o Francia y de ahí despachada al territorio vietnamita.[30]

La vacunación, sin embargo, ha progresado lentamente. A la fecha, Vietnam ha aplicado 18 843 004 vacunas, lo que significa que el 17 por ciento de la población ha recibido al menos una dosis, pero el esquema completo sólo lo tiene el 2. 3 por ciento de los vietnamitas.[31] La lentitud con la que progresa la vacunación contra el SARSCoV2 obedece a dos razones: el sentimiento anti-chino y la escasez internacional de vacunas que aqueja, en general, a los países en desarrollo. A Vietnam han llegado dosis de la vacuna china Sinopharm pero muchas personas dudan de su seguridad y eficacia. Con todo, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) en una encuesta encontró que el 67 por ciento de los vietnamitas coinciden en que es necesario vacunarse. El segundo tema, el de la escasez de vacunas, es muy grave. La ciudad Ho Chi Minh, donde la pandemia ha crecido considerablemente, prácticamente ha agotado las vacunas con que contaba y ahora las autoridades buscan desarrollar una diplomacia en salud para lograr donaciones, tratamientos e insumos médicos de parte de la comunidad internacional.[32] Con todo, la pandemia ha evidenciado el funcionamiento de las instituciones vietnamitas, algo a destacar considerando la percepción generalizada en muchas partes del mundo de que las instituciones se encuentran en crisis. Las autoridades han sido capaces no sólo de poner en marcha medidas que, de otra manera, habrían generado un escenario dantesco, además de que han logrado aprovechar la coyuntura para hablar con inversionistas extranjeros y convencerlos del atractivo que reviste el país justamente para hacer negocios. Esa certidumbre que hasta ahora ha logrado proyectar el gobierno de Vietnam a su población y al mundo, es su mejor activo, aunque ciertamente sigue a prueba en las condiciones actuales.


[1] Klaus Schwab (2019), World Competitiveness Report 2019, Geneva, World Economic Forum, p. xiii, disponible en http://www3.weforum.org/docs/WEF_TheGlobalCompetitivenessReport2019.pdf

[2] The Heritage Foundation (2020), 2020 Index of Economic Freedom, Washington D. C. The Heritage Foundation, disponible en https://www.heritage.org/index/country/Vietnam

[3] Transparency International (2020), Corruption perception Index 2020, Berlin, Transparency International, disponible en https://www.transparency.org/en/cpi/2020/index/vnm

[4] Institute for Economics and Peace (2020), Global Peace Index 2020. Measuring Peace in a Complex World, Sydney, Institute for Economics and Peace, disponible en http://visionofhumanity.org/indexes/global-peace-index/

[5] John Hopkins (October 2019), Global Health Security Index. Building  Collective Action and Accountability, disponible en https://www.ghsindex.org/wp-content/uploads/2020/04/2019-Global-Health-Security-Index.pdf

[6] Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación Ficha país: Vietnam, Madrid, disponible en http://www.exteriores.gob.es/documents/fichaspais/vietnam_ficha%20pais.pdf

[7] IWGIA (18 de marzo de 2021), Pueblos indígenas en Vietnam, disponible en https://www.iwgia.org/es/vietnam/4174-mi-2021-vietnam.html

[8] Ministry of Fireign Affairs of Vietnam (2010), Review of Vietnamese Migration Abroad, Hanoi, Consular Services, disponible en https://eeas.europa.eu/archives/delegations/vietnam/documents/eu_vietnam/vn_migration_abroad_en.pdf

[9] Pol Pareja (30/05/2015), “40 años de la caída de Saigón: la Guerra de Vietnam en cifras”, en La Vanguardia, disponible en https://www.lavanguardia.com/internacional/20150430/54430301719/40-anos-caida-saigon.html véase también María Laura Brito (2020), 30 de abril de 1975. A 45 años del fin de la Guerra de Vietnam, La Plata, Instituto de Relaciones Internacionales de la Universidad de La Plata, disponible en https://www.iri.edu.ar/index.php/2020/04/30/a-45-anos-del-fin-de-la-guerra-de-vietnam/

[10] ACNUR Comité Español (mayo 2017), Problemas que afectan a los niños vietnamitas, disponible en https://eacnur.org/blog/ninos-vietnamitas/

[11] Institute for Health Metrics and Evaluation (May 31, 2021), Recientes cifras mundiales revelan casi ocho millones de muertes por tabaquismo en 2019, y el 90 % de los nuevos fumadores son adictos a los 25 años, disponible en https://www.prnewswire.com/news-releases/recientes-cifras-mundiales-revelan-casi-ocho-millones-de-muertes-por-tabaquismo-en-2019-y-el-90-de-los-nuevos-fumadores-son-adictos-a-los-25-anos-871805784.html

[12] Ibid.

[13] Ibid.

[14] VNA (noviembre 11, 2016), “Vietnamitas son los mayores consumidores de bebidas alcohólicas en ASEAN”, en Vietnam, disponible en https://es.vietnamplus.vn/vietnamitas-son-los-mayores-consumidores-de-bebidas-alcoholicas-en-asean/67682.vnp

[15] Beer Business (16/05/2016), “Vietnam. “When I saw that 94% of the total alcohol consumption is beer, I was really shocked””, disponible en https://journal.beer/2016/05/16/vietnam-when-i-saw-that-94-of-the-total-alcohol-consumption-is-beer-i-was-really-shocked/

[16] MAPFRE (2018), Sistemas de salud: un análisis global. Comparación internacional de sistemas sanitarios seleccionados, Madrid, Fundación MAPFRE, pp. 12-23, disponible en https://www.fundacionmapfre.org/documentacion/publico/i18n/catalogo_imagenes/grupo.do?path=1097443

[17] I. Vera (24 de septiembre 2018), “Bismarck vs Beveridge: el cara a cara de los sistemas de salud en la Unión Europea”, en Planta Doce, disponible en https://www.plantadoce.com/entorno/bismarck-vs-beveridge-el-cara-a-cara-de-los-sistemas-sanitarios-en-la-union-europea.html

[18] Organización Internacional del Trabajo (1 de diciembre 2009), De Bismarck a Beveridge: seguridad social para todos, Ginebra, OIT, disponible en https://www.ilo.org/global/publications/world-of-work-magazine/articles/ilo-in-history/WCMS_122242/lang–es/index.htm

[19] Universidad Autónoma de Madrid (2011), Introducción a los sistemas sanitarios. El sistema sanitario español, Madrid, Universidad Autónoma de Madrid-Unidad de Medicina de Familia y Atención Primaria-Facultad de Medicina, disponible en https://formacion.uam.es/pluginfile.php/122653/mod_resource/content/1/Tema_7.pdf

[20] Jörg Reinherdt (25 julio, 2019), “Cómo los países en desarrollo pueden lograr cobertura universal de salud”, en El País, disponible en https://elpais.com/elpais/2019/07/16/planeta_futuro/1563286711_194419.html

[21] Tsung-Mei Chang (November 2014), “Vietnam’s Health Care System Emphasizes Prevention And Pursues Universal Coverage”, en Health Affairs, vol. 33, no. 11, disponible en https://www.healthaffairs.org/doi/10.1377/hlthaff.2014.1141

[22] Ibid.

[23] ICEX (julio 2013), Vietnam ampliará su red de hospitales durante los próximos años, disponible en https://www.icex.es/icex/es/navegacion-principal/todos-nuestros-servicios/informacion-de-mercados/paises/navegacion-principal/noticias/4696535.html?idPais=VN

[24] Jörg Reindhardt, Ibid.

[25] Emma Willoughby (June 29, 2021), “An ideal public health model? Vietnam’s state-led, preventative, low-cost response to COVID-19”, en Brookings, disponible en https://www.brookings.edu/blog/order-from-chaos/2021/06/29/an-ideal-public-health-model-vietnams-state-led-preventative-low-cost-response-to-covid-19/

[26] Emma Willoughby, Ibid.

[27] Hugh Bohane (May 13, 2021), “COVID-19 Worries Return to Vietnam”, en The Diplomat, disponible en https://thediplomat.com/2021/05/covid-19-worries-return-to-vietnam/

[28] Ibid.

[29] Ibid.

[30] CCI France Vietnam (24/08/2021), COVID-19 vaccination in Vietnam, disponible en https://www.ccifv.org/en/vietnam/covid-19-information/covid-19-vaccination-in-vietnam.html

[31] Josh Holder (August 28, 2021), “Tracking Coronavirus Vaccinations Around the World”, en The New York Times, disponible en https://www.nytimes.com/interactive/2021/world/covid-vaccinations-tracker.html

[32] VOA (August 26, 2021), Vietnam Faces Risk of Interruption in Vaccination Campaign, disponible en https://www.voanews.com/covid-19-pandemic/vietnam-faces-risk-interruption-vaccination-campaign

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