Pasada la tormenta electoral en la cual el perredismo capitalino fue arrasado por el vendaval moreno, julio amaneció despejado para Miguel Ángel Mancera gracias a unas medidas que pintan ser tiros de precisión.
Con ellos, el Jefe de Gobierno podrá trabajar bien, dar resultados, mantenerse sin afiliación partidista y luego lo que venga, se pueda y se quiera.
Nombramientos como el del periodista Julián Andrade, de probada capacidad operativa y visión integral de sus tareas de comunicación, así como la circunstancia creada de solicitar la renuncia a su gabinete, le dan resultados lo mismo adentro que afuera. Sabe que la percepción ciudadana se construye o se derrumba en lo cotidiano.
Para la comentocracia, el anuncio peca de efectista, sin embargo la imagen que se logra es de un gobernante crítico de sí mismo con reflejos firmes. Puertas adentro se sabe que la remoción será selectiva, no masiva. El resultado: mayor y mejor interlocución con los nuevos protagonistas en el juego, pasando por el próximo coordinador de la mayoritaria fracción de Morena en la ALDF, César Cravioto, hasta futuros jefes delegacionales, como Ricardo Monreal o Xóchitl Gálvez.
El operativo de seguridad en la colonia Condesa contra supuestas extorsiones, ya desmentidas por el procurador, la reinauguración de la Línea 12 del Metro junto a quehaceres cotidianos, le dan a Mancera un pronóstico favorable en el corto plazo.
Golpe maestro
Los criterios utilizados por el GDF en materia de verificación vehicular para asignar los hologramas Cero y Uno han sido sometidos a críticas de expertos ambientalistas respecto a su racionalidad (y el componente de equidad social no es menor). ¿Un automóvil contamina más dependiendo de su año-modelo o por el mantenimiento y kilometraje?
La semana pasada, la Suprema Corte de Justicia de la Nación determinó amparar a un grupo de automovilistas que esgrimieron justamente ese racionamiento, si las emisiones contaminantes están en norma, no debería restringirse su circulación diaria. E igual en sentido opuesto, si un automóvil no cumple con esos criterios, aun siendo de año-modelo menor a 8 años, no debería tener holograma Cero.
El GDF atiende el criterio de la SCJN, pasa la pelota a la cancha de la Comisión Ambiental de la Megalópolis, instancia en la cual están representadas las delegaciones del DF y 224 municipios de los estados de México, Morelos, Puebla, Tlaxcala e Hidalgo y presidida por el secretario del Medio Ambiente federal, el Jefe de Gobierno y los gobernadores aludidos, será la que defina y opere en consecuencia.
El modelo del auto ya no condicionará si circula diario o no, lo hará la cantidad de contaminantes que produzca. El impacto en la clase media, mayoritaria en esta ciudad, será de alivio ante una presión económica menos. Suben los bonos de Mancera. Golpe positivo; otro, limpio y preciso.
Este artículo fue publicado en La Razón el 07 de Julio de 2015, agradecemos a Carlos Urdiales su autorización para publicarlo en nuestra página
