La Fiscalía General de Veracruz, determinó que el reportero Juan Mendoza Delgado, cuya desaparición se reportó el pasado 1 de julio, murió por atropellamiento y con la emisión de un boletín dio por cerrado el caso. La versión oficial sobre la muerte del informador, fue consignada tal cual por el portal Aristegui Noticias, lo cual no deja de llamar la atención si se toma en cuenta que Veracruz es una de las entidades donde más periodistas son asesinados y donde apenas hace unos días, su máxima autoridad, Javier Duarte de Ochoa, acusó que los informadores “no se portan bien” por tener tratos con el crimen organizado.
Aristegui Noticias no se ha caracterizado por llevar un seguimiento propio de los casos de agresiones a periodistas registrados durante el año, ni por proporcionar detalles sobre las difíciles condiciones en que se desarrolla la actividad periodística en todo el país. Salvo el caso del reportero Moisés Sánchez, que por la trascendencia que tuvo, mereció una cobertura mayor, muchos otros – que el lector puede consultar en la edición de etcétera de junio – han pasado desapercibidos en este portal y otros más, como el de Juan Mendoza, se han ceñido a las versiones oficiales.
Si bien se han reproducido algunos contenidos multimedia, producidos por otros medios en donde se muestran casos de violencia contra periodistas y reporteros en México, el tema no ha merecido un trabajo de investigación a fondo por parte de un sitio que enarbola la libertad de expresión como el eje rector de su actividad, lo cual es indicativo de una solidaridad gremial a medias.
