viernes 19 abril 2024

Sí… pero se fugó

por Rubén Cortés
Etcétera

Para vivir un momento en el que muchas fuerzas apuestan al fracaso del gobierno del cual dirige la política interna, Miguel Osorio dio la mejor conferencia que podía dar alguien contra cuyo jefe la opinión pública está siendo implacable por la fuga de El Chapo Guzmán.

Osorio explicó lo siguiente:

—El delincuente llevaba un brazalete para conocer su ubicación dentro del penal.

—En su celda tenía instalado un sistema de vigilancia de circuito cerrado, monitoreado durante las 24 horas del día, desde el interior del penal y el centro de control de la Policía Federal.

—Pero por razones de derechos humanos, de respeto a su intimidad, la videovigilancia tenía dos puntos ciegos: mientras se bañaba o cumplía necesidades fisiológicas.

—El penal del Altiplano opera bajo estricto cumplimiento de protocolos y los estándares internacionales requeridos en cárceles de máxima seguridad.

—Cuenta con sistema de videovigilancia de más de 750 cámaras y monitoreo permanente con puntos de revisión y módulos de aislamiento para internos de alta peligrosidad.

—En el exterior del penal funciona un operativo de vigilancia adicional, del Ejército Mexicano y de la Policía Federal.

—Está certificado por la Asociación de Correccionales de América, misma que usan los centros penitenciarios de Estados Unidos y Canadá.

—Cuenta con bardas perimetrales, aduanas peatonales y vehiculares, torres de vigilancia internas y externas, además de 26 filtros entre puertas y controles desde el área de aduana hasta la de tratamientos especiales.

Entonces por qué pudo escapar el narcotraficante más peligroso del mundo. Cómo fue posible que a 1.5 kilómetros del penal construyeran una solitaria casa donde desembocó el túnel del escape, del cual 300 camiones sacaron tierra durante un año, sin que ello alarmase a nadie.

El propio secretario dio algunas pistas: unas retóricas, otras precisas, pero una, especial, ante la cual viene valiendo un reverendo sorbete que un penal cuente con videovigilancia de más de 750 cámaras y monitoreo permanente, o el reo lleve un brazalete preventivo para conocer su ubicación:

—”Es decir, Guzmán Loera logró fugarse a partir de una estrategia que pudiera evadir todos los sistemas internos de seguridad diseñados conforme a estándares internacionales”.

Pero la verdad sin tapujos es que El Chapo se pudo escapar porque nos hemos instalado, como sociedad, en un cómodo escenario en el que damos por descontado que el país vive sin reglas, sin valores y sin instituciones que funcionen.

Su “estrategia” para “evadir” los sistemas diseñados según estándares internacionales, se basó especialmente en algo bastante ordinario: en la ineptitud de muchos de nuestros funcionarios y en la complicidad de personal del Altiplano.

En una descomposición galopante que amenaza con instalar a México, en el peor de los escenarios.


Este artículo fue publicado en La Razón el 14 de Julio de 2015, agradecemos a Rubén Cortés su autorización para publicarlo en nuestra página

También te puede interesar