viernes 29 marzo 2024

Nuestra solidaridad con Denise Dresser

por Alejandra Escobar Atempa

El Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación confirmó que el presidente López Obrador llevó a cabo actos de propaganda gubernamental en periodo prohibido, durante la gira de trabajo que llevó a cabo los días 12 y 13 de febrero pasado, en Sonora.

Ese fin de semana, por cierto, fue cuando se difundió el comunicado de los 17 gobernadores afines al gobierno federal que motivaron también las medidas cautelares del INE para ordenar su retiro inmediato de las redes sociales.

La ley aprobada por legisladores, y no por el INE, está siendo transgredida asiduamente por el gobierno y Morena, como consta en los panorámicos que se han distribuido en distintas entidades del país, nosotros tenemos registro de al menos 15, y como también puede verse en los materiales que se han difundido en redes sociales donde varios jóvenes con chaleco guinda reparten propaganda y organizan asambleas informativas para impulsar la revocación de mandato.

Por cierto, hoy en rueda de prensa el senador Ricardo Monreal hizo patente que, en efecto, la norma electoral fue determinada por el poder Legislativo y no el Ejecutivo y también dijo que ésta debe ser respetada y quien no lo haga debe atenerse a las sanciones. Ese dicho se suma a lo que el mismo senador expuso la semana pasada cuando expresó su respeto a los periodistas de México, a todos, en el marco de la ofensiva del presidente contra periodistas que le han cuestionado. Ambos planteamientos los hace uno de los líderes más reconocidos de Morena por lo que, muy probablemente, pronto tendrá respuesta de parte de los sectores más duros de ese partido.

Ya que hablamos de resoluciones del Tribunal Electoral también destaca la de hoy en la que ordena a la Fiscalía Especializada en Delitos Electorales (FEDE) entregar información al INE, se trata de las carpetas de investigación que se tienen sobre el caso de Odebrecht y de Pío López Obrador. Podríamos estar en la antesala de nuevas revelaciones detonadas dentro de la familia presidencial. Como ustedes seguramente recuerdan, en agosto de 2020 Latinus difundió dos videos donde se mira al hermano del presidente con sobres de dinero y también recordarán que el mismo Andrés Manuel dijo que esas eran contribuciones para su movimiento.

Mientras, el presidente López Obrador continúa con sus pases mágicos que todos sabemos y enfatiza que el departamento en Palacio Nacional donde vive es “modesto” si se compara como estaban Peña Nieto y Calderón, es decir, habla de todo pero no de las acciones de su gobierno para hacer realidad lo que proclama como si estuviera en campaña y no en el cargo que le confirieron millones de mexicanos hace más de tres años.

Hoy, una vez más, el presidente de México enderezó sus recursos retoricos pero sobre todo los recursos del Estado para agredir a varios periodistas y analistas. Carmen Aristegui, Ciro Gómez Leyva, Jorge Ramos, Carlos Loret y Denise Dresser a quien acusó, vale decir mejor, difamó al involucrarla en una supuesta confabulación con el gobierno de Estados Unidos de acuerdo con supuestos cables de Wikileaks. Dresser ya anunció que responderá al Ejecutivo Federal mediante una carta pública; nosotros ahora le expresamos nuestra solidaridad. Pero además decimos que de acuerdo con esos cables quien sí sostuvo pláticas con funcionarios estadounidenses es Andrés Manuel López Obrador, tal y como demuestra Orquídea Fong en este portal.

Coincidimos con quienes dicen que el presidente busca desviar la atención puesta en varias irregularidades dentro de su administración; señaladamente el conflicto de interés en el que se encuentran su hijo y su nuera pero, acaso con un grado de profundidad mayor, los datos que demuestran el enorme desastre que está dejando en el país en todos los órdenes como resultado de su ineficacia que, incluso, alienta la corrupción de la peor manera posible, es decir, negando que exista. Hasta ahora, sin embargo, ese propósito del político tabasqueño no ha materializado precisamente por el denuedo crítico en varios medios de comunicación y porque la realidad es mucho más dura y apabullante que un pañuelito al aire sacudido por el presidente.

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