Vaya día movido que tuvo ayer Margarita Ríos-Farjat, jefa del SAT. En la mañanera acompañó al presidente López Obrador, quien firmó el Decreto para evitar la condonación fiscal a grandes contribuyentes. En un acto que el Presidente supo utilizar de manera política, aprovechó para echarles en cara a Felipe Calderón y Peña Nieto que habían perdido 409 mil millones de pesos durante sus sexenios; al perdonar el pago de impuestos a los grandes contribuyentes, “se acabó el huachicoleo de los de arriba”, remató AMLO.
ADIÓS “HUACHICOLEO DE ARRIBA” SIN NOMBRES
Ahí, Ríos-Farjat colaboró en la mañanera con datos duros. Fueron 108 empresas las más beneficiadas en los últimos sexenios, y de ellas el 54% concentró los perdones fiscales. Y claro que la jefa del SAT, conocedora de su materia, evitó dar los nombres, por…secreto fiscal. Pero el golpe político ya estaba dado: AMLO no lanza una reforma fiscal progresiva, que sería indispensable para contar con recursos de sus obras de infraestructura y programas sociales, pero sí hace una buena medida fiscal para impedir más privilegios. Sobra decir, la rumorología se soltó a todo lo que da para conocer los nombres de las grandes empresas condonadas.
FORMALIZAR UBER, CABIFY, BOLT, BEAT, RAPPI, SIN DELANTAL y CORNER SHOP
Le venía otra faena a Ríos-Farjat, menos vistosa pero quizá hasta más efectiva. Se sentaba junto con Arturo Herrera, subsecretario de Hacienda, y los directivos de plataformas digitales de transporte. El objetivo, un convenio para pagar impuestos. Estuvieron los directivos de Uber, Cabify, Bolt, Beat, Sin Delantal, Uber Eats, Rappi y Corner Shop.
Y lograron un acuerdo ganar-ganar. Hacienda gana porque las plataformas digitales van a retener el impuesto a sus conductores o repartidos de alimentos. Las plataformas digitales también ganan porque formalizan a sus trabajadores, dándoles Seguro Social y otros beneficios donde los apoyarán con créditos de Nafin y Sociedad Hipotecaria Federal (por lo menos eso dijeron las plataformas digitales).
DIDI Y POSTMATES, LA INFORMALIDAD ES LO SUYO
Además, las plataformas ganan al pagar un impuesto mucho menor que el resto de la economía. A los conductores y repartidores se les retendrá el 8% del IVA, es decir la mitad del que todos pagamos. Y se les retendrá una tasa de ISR de entre el 3% y el 9%, cuando hay personas físicas que pagan hasta el 35%. Los únicos que no entraron, y que no pagarán impuestos y seguirán siendo informales, fueron Didi y el servicio de reparto Postmates.
VAMOS POR LOS GRANDES, PARA QUE PAGUEN IMPUESTOS
Esto sólo es el principio. Hacienda va por los grandes contribuyentes de la economía digital. Arturo Herrera recuerda que la economía digital representa alrededor del 5% del PIB. Y sigue creciendo. Van por las grandes: Netflix, el servicio streaming de mayor penetración que ya compite con la TV; Spotify y Apple Music, los servicios de música que han sustituido los discos; Facebook, la red social más grande del planeta que transmite comerciales y patrocinadores sin pagar impuestos. El cobro de impuestos no será la única discusión que tengan estas plataformas. Todavía queda pendiente la neutralidad de la red. Vienen varias batallas en la economía digital.
Este artículo fue publicado en Excélsior el 21 de mayo de 2019, agradecemos a José Yuste su autorización para publicarlo en nuestra página.
