jueves 28 marzo 2024

La exigencia migratoria-electoral

por Javier Solórzano

La forma en que se está atacando el tema migratorio está saliendo cada vez más cara. Se entiende lo que se pudo haber negociado y aceptado, en función de que el Gobierno mexicano tenía poca capacidad de maniobra para ofrecer otro tipo de opciones para la migración.

Sin embargo, hoy se ven en los hechos estrategias y acciones que no tienen que ver con el espíritu que quiere imbuir al país el nuevo gobierno. El estreno de la Guardia Nacional se ha abocado a detener y a frenar el paso de migrantes, más que a atacar el grave problema de seguridad que tenemos y padecemos.

Desde que era candidato, Trump se lanzó con todo sobre el tema migratorio, el tono nunca ha dejado de ser agresivo y hasta grosero. Estaba claro que ante las negociaciones de hace unas semanas no iba a bajar la guardia. Hizo exactamente lo que siempre hace: imponer, atacar, amenazar y aprovechar el momento.

El gobierno mexicano acabó aceptando lo que le plantearon y en el camino quizá hasta se ofreció. Fue una negociación en la cual se la pasó presionado y con el tiempo en contra, por la amenaza de la aplicación del 5% de aranceles a los productos mexicanos que se exportan a EU.

El país salió momentáneamente de un problema, pero se metió en otro. Estamos en medio de una situación crítica bajo una mirada severa del mundo, y, sobre todo, de los migrantes. Se puede estar exagerando las cosas, pero en otros casos han aparecido imágenes tan brutales que es difícil pasar por alto la crítica.

El inicio del sexenio ha tenido sus trompicones en materia económica. Hay muchas presiones de las cuales no está fácil salir. Algunas de ellas requieren de tiempo para que el Gobierno pueda revertirlas con la plena instrumentación de sus proyectos, en tanto que otras quizá van a necesitar de un cambio de rumbo.

Sigue vigente el reto para que el Gobierno asuma la autocrítica, a la cual no es muy proclive, y que al tiempo escuche voces diferentes, las cuales no necesariamente son opositoras.

Diversos empresarios siguen manifestando apoyo al Gobierno, hay que escucharlos, hay que hacerles caso y, sobre todo, hay que cumplir los acuerdos a los que eventualmente se llegue. En este rubro han aparecido críticas, en el sentido de que se acuerda una cosa y luego se dice otra y se hace otra más.

Ante lo que se está viendo sobre el tema migrante, todo indica que los negociadores mexicanos, con el evidente aval del Presidente, terminaron por llegar a acuerdos límite. Está siendo muy difícil para el Gobierno la instrumentación de las políticas migratorias, a pesar de su clara vocación de querer resolver de la mejor manera el asunto.

Las imágenes que ya ha visto todo el mundo de un padre con su hija a la vera del río Bravo ahogados bocabajo, se ha convertido en una imagen de identidad de lo que está pasando en el país en materia migratoria. La historia de la familia salvadoreña, que pretendía cruzar el río para pasar a EU, es una de muchas.

Lo que la hace diferente es que en esta ocasión todos hemos visto esta triste y dolorosa imagen, la cual seguramente no es diferente de lo que viven muchos migrantes que pretenden llegar a la Unión Americana por el desierto de Arizona o cruzando el mismo río, sólo por mencionar dos de las vías para llegar al cada vez más dudoso “sueño americano”.

El Gobierno está viviendo uno de sus momentos más complicados desde diciembre. Con el tema migratorio está en medio de dos problemas.

Uno es el que está viviendo bajo la actual situación migratoria que inevitablemente lo está exponiendo, y el otro vendrá en algunas semanas cuando conozcamos si Trump está satisfecho con sus demandas migratorias-electorales.

RESQUICIOS.

Una de las mejores caras de nuestro país ha sido sin duda el cine. El lunes contra viento y marea se entregaron los Ariel a lo mejor del último año. Si resulta complicado y peleado hacer la ceremonia, imaginemos lo complicado y peliagudo que se ve venir hacer cine en el país.


Este artículo fue publicado en La Razón el 26 de junio de 2019, agradecemos a Javier Solórzano su autorización para publicarlo en nuestra página.

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