sábado 20 abril 2024

Forzados a abrir en semáforo rojo; de restaurantes a departamentales

por José Yuste

Primero fueron los restaurantes. Ahora son las tiendas especializadas y departamentales. Le siguen los hoteles. Todos piden reabrir sus puertas, tanto al gobierno capitalino de Claudia Sheinbaum, como al del Edomex, de Alfredo Del Mazo. Los sectores piden abrir aun estando en semáforo rojo, pero cuidando las exigencias sanitarias.

Lo otro, nos dice Vicente Yañez, presidente ejecutivo de la ANTAD, es que nos vuelva a suceder lo del Día de Reyes: todo mundo salió por juguetes y los consiguió en la economía informal, sin normas sanitarias y sin garantías para el consumidor.

PRIMERO LA SALUD, PERO CON APOYOS DEL GOBIERNO

En un mundo ideal, lo primero, desde luego sería la salud. Después la economía. Pero si cierras la economía, las autoridades federales deberían estar apoyando para evitar quiebres de pequeñas empresas, de sectores sensibles. Deberían estar enviando ingresos mínimos a los trabajadores para el “Quédate en casa”.

Sin ningún apoyo del gobierno federal, los gobiernos locales han intentado dar ayudas. A todas luces insuficientes.

Por más que los trabajadores se quieran quedar en casa, y las empresas quieran mantenerse cerradas, tienen que sobrevivir.

El primer grito de desesperación fue el de abrir o morir de los restauranteros.

Ahora le siguen las tiendas especializadas (desde Zara, Flexi, Petco) y las departamentales (Palacio de Hierro, Liverpool, Sears hasta Coppel). Están quebrando.

De por sí, durante 2020 las tiendas departamentales cayeron un 13.6% en sus ventas totales.

Las especializadas cayeron 2% durante 2020.

Y, precisamente la mejor temporada decembrina, tuvieron que estar cerradas por semáforo rojo del covid.

REUNIÓN PARA REABRIR DEPARTAMANTALES Y ESPECIALIZADAS

Ayer hubo una reunión entre el presidente de la ANTAD, Vicente Yáñez, y funcionarios del gobierno de Sheinbaum en la capital: Alfonso Suárez (Gobierno), Fadlala Akabani (Economía), Pepe Merino (Digital).

Las pérdidas de tiendas departamentales y especializadas llevan pérdidas de 21 mil 105 millones de pesos, y la pérdida de las cadenas de proveeduría.

Hay 83 mil 952 personas ocupadas directamente en las tiendas. Sus empleos están en riesgo. Pero por cada empleado directo en las tiendas, se considera unos cinco indirectos por proveedores.

Desde luego están las ventas en línea, pero todavía no son suficientes para sacar adelante al sector.

SHEINBAUM, SENSIBLE, AUNQUE EN ENCRUCIJADA

Claudia Sheinbaum ha sabido ser sensible a los sectores productivos. Ha sido una gobernante local que intentó tener una política de salud más congruente frente a la pandemia. Exigió cubrebocas y trató de enviar recursos a ciertas actividades (los 2 mil pesos a cada mesero). Y frente al desbordamiento de la pandemia, la saturación de hospitales, y falta de oxígeno, no tuvo otra alternativa que emplear el semáforo rojo para el cierre de actividades.

El problema es que los sectores económicos, sin ayudas económicas (del gobierno federal, sobre todo), están quebrando. Semanas después, las economías capitalina y del Estado de México se ven forzadas a abrir actividades, aunque no sean esenciales.


Este artículo fue publicado en Excélsior el 22 de enero de 2021. Agradecemos a José Yuste su autorización para publicarlo en nuestra página.

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