AMLO, DF, 9 de abril de 2014: “Miguel Mancera es mucho mejor que Enrique Peña; el gobernador del Estado de México, Eruviel Ávila; el secretario de Gobernación, Miguel Osorio; el secretario de Hacienda, Luis Videgaray y el procurador Jesús Murillo…”
AMLO, Cuetzalan, Puebla, 21 de febrero de 2016: “Para 2018, de los independientes veo contra mí a El Bronco, quien es independiente del pueblo, pero no de la mafia del poder; y a Miguel Mancera. Son políticos corruptos y traficantes de influencias que integran la mafia del poder”.
Ése es el valor de la palabra del dueño de Morena: como dice una cosa, dice otra. Hace dos años el Jefe de Gobierno era “mucho mejor” que todos; ahora integra “la mafia del poder”.
Lo mismo vale su opinión sobre Alfonso Romo, beneficiario del Fobaproa, el rescate bancario considerado por AMLO como el “fraude más grande de la historia después de La Conquista”. Ahora es su empresario de cabecera.
Convencido de que la gente carece de memoria, AMLO juega con las palabras. Afirma que “tonto es el que piensa que el pueblo es tonto”. Pero es el primer convencido de ello al cambiar de opinión con igual facilidad a la que transpira.
Por eso no da importancia a ir contra el desarrollo y bienestar de la ciudad que gobernó de 2000 a 2005 y donde construyó las obras que quiso, como los segundos pisos sobre el Periférico.
Durante la actual administración capitalina ya consiguió tirar dos proyectos arquitectónicos de relevancia: el Corredor Cultural Chapultepec (generaría 13 mil empleos y una inversión de mil millones de pesos) y la Ciudad del Futuro, en Coyoacán (una inversión de cinco mil millones de pesos).
Y va por los siguientes:
—Rueda de la fortuna, en el bosque de Chapultepec, que sólo generará 60 empleos pero tendrá una inversión de 200 millones de pesos y distracción para millones de personas.
—Deprimido Mixcoac, con inversión de seis mil 500 millones de pesos y permitirá ampliación de banqueta a 4 mil 598 metros cuadrados y reducción del radio de giro para que los automovilistas bajen la velocidad y los peatones tengan más tiempo para atravesar la calle.
—Nuevo aeropuerto, que generará 160 mil empleos y moverá 120 millones de pasajeros, incluirá una universidad de aeronáutica y aviación y viviendas, hospitales, escuelas, centros deportivos y comercios para quienes laboren en sus instalaciones.
—Tren interurbano, que generará 52 mil empleos y una inversión de tres mil 500 millones de pesos.
Ayer Miguel Mancera advirtió que, por lo menos, la rueda de la fortuna sí va. Ojalá no lleve su decisión a oootra consulta.
Porque esas consultas sólo demuestran debilidad ante quien lo considera un mafioso.
Este artículo fue publicado en La Razón el 23 de Febrero de 2016, agradecemos a Rubén Cortés su autorización para publicarlo en nuestra página
