jueves 28 marzo 2024

El problema, la calidad de empleo

por José Yuste

Desde luego hay buena noticia en el empleo. El Inegi nos arrojó un dato alentador para julio, mes en que empezó a reabrise la economía a pesar de la crisis sanitaria. De  las 12 millones de personas que se desocuparon en abril, ya en plena pandemia, pudieron regresaron a trabajar 7.2 millones de personas con la nueva normalidad. El dato lo celebró López Obrador (marca registrada) en la mañanera. ¿El problema? La informalidad empieza a ganar terreno de manera fuerte, y… la mayoría de los empleos son tomados por hombres significando las dificultades para las mujeres de entrar al mercado laboral.

INFORMALIDAD, EL MONSTRUO QUE ABSORBE

La informalidad dejó de ser esa válvula de escape, para transformarse en una verdadera economía paralela.

En la informalidad (según la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo) hay trabajando 27.3 millones de personas al mes de julio. Todavía la informalidad no llega a las cifras del año pasado, pero va a llegar.

El año pasado, en julio del 2019, tuvimos 30.9 millones de personas en la informalidad. En este junio del 2020, tuvimos 27.3 millones de personas. El riesgo es el ritmo, cada vez mayor y constante, de quienes trabajan en la informalidad.

Cuando comenzó la pandemia, en abril de este año, tuvimos 20.7 millones informales. Cuatro meses después, en junio, esos 20.7 millones de informales aumentaron hasta 27.3 millones de trabajadores informales.

Aumentamos casi 7 millones de informales en cuatro meses. Es triste, una empresa formal, constituida, que paga impuestos y contribuciones sociales, no le alcanza para estar contratando personas, quienes tendrían su seguridad médica, de pensión y de crédito hipotecario. Las empresas de servicios turísticos, construcción,  restaurantes, transporte, apenas y están sobreviviendo. Y ni se diga de las pequeñas empresas.

Las personas necesitan trabajar, y se van a la informalidad, donde no reciben contribuciones sociales, y lo peor: en una crisis sanitaria como es el coronavirus, no reciben atención médica.

MENOS DE CINCO SALARIOS MÍNIMOS Y POCAS MUJERES

La mayoría de las personas que empezaron a trabajar son hombres, lo cual marca un entorno totalmente adverso para que las mujeres puedan laborar. Urge una política de género para apoyarlas. La tasa de participación económica en el mercado de trabajo, sólo es de 39.2% en mujeres, mientras que la de hombres es mucho mayor de 72.2 por ciento. El empleo empezó a recobrarse en México. El problema es la calidad de este empleo, en donde, por cierto, el 78.2% de la población ocupada gana menos de cinco salarios mínimos.

QUIEREN TRANSGÉNICOS

Los algodoneros le piden al gobierno de López Obrador, aprobar semillas transgénicas. El secretario del Consejo Nacional de Productores de Algodón, Juan Armenta, argumenta que la producción de algodón cayó en 50%, por el bajo precio y por la prohibición de semilla transgénica. Le pide a la nueva secretaria de Semarnat, María Luisa Albores, apoyarlos. El tema de los transgénicos sigue siendo debatible, y más en el gobierno de la 4T que no se hizo bolas y los prohibió.


Este artículo fue publicado en Excélsior el 04 de septiembre de 2020, agradecemos a José Yuste su autorización para publicarlo en nuestra página.

 

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