lunes 18 marzo 2024

Donde los gobiernos imponen oscuridad

por Ingrid Motta

Desde hace más de 10 años, nació Access Now, organización internacional sin fines de lucro que busca garantizar los derechos humanos, la vida pública y la conectividad por internet, y que bajo la bandera de Shutdown Tracker Optimization Project (STOP), empezó a observar los datos de diferentes incidentes en bloqueos de internet, para así determinar sus causas y una posible correlación con hechos sociales o políticos.

El cierre de internet se define como una interrupción intencional en poblaciones específicas y en tiempos determinados, como un medio de control de la información, limitación en el acceso a banda ancha, bloqueo de servicios digitales o comunicación bidireccional, ocasionada por actores con intereses particulares y que de manera premeditada, cuartan la conectividad, justificándose en supuestas fallas técnicas.

En el estudio The Current, realizado por expertos en internet de Google, Jigsaw, los bloqueos en internet tienen la finalidad de frustrar a personas, especialmente jóvenes, y cortar su flujo de información para mantenerlas atemorizadas. Mediante la recolección de datos cualitativos y cuantitativos, STOP categoriza la naturaleza de los “apagones de conectividad”, su alcance, afectación social desde su origen, y su posible magnitud.

El estudio también refiere a que gobiernos de todo el mundo han aprendido y adoptado esta técnica, convirtiéndose en un método recurrente para reprimir a las oposición, mermar o callar la libertad de expresión, y boicotear la transmisión de información de observadores internacionales para impedir movilizaciones sociales. Asimismo destaca similitudes importantes sobre cierres ocurridos en coincidencia con elecciones o protestas civiles en donde los gobiernos justifican esta ausencia de conectividad argumentando que están evitando la propagación de noticias falsas.

Desde hace 10 años, STOP ha registrado 850 cierres en la red realizados de forma intencional, de los cuales, 768 han ocurrido en los últimos cinco años,  y han vendo disminuyendo conforme el mundo se ha tenido que adaptar a la conectividad desde el confinamiento, de modo que en 2019 hubo 213 cierres y en el 2020 se contabilizaron 155.

Los ataques más frecuentes se dan en África y Asia en momentos específicos de eventos democráticos, y en donde candidatos de la oposición evitan que los ciudadanos reciban información que les reste apoyo.

Ante estas coincidencias, y con el objetivo de iluminar en conectividad a los pueblos que son restringidos en el uso de internet, STOP creo #KeepItOn, una respuesta para que ciudadanos puedan documentar y denunciar violaciones a sus derechos civiles y humanos, y sean apoyados por organizaciones internacionales en su papel de observadores de la democracia.

Afortunadamente este asunto es cada vez mas evidente y ha puesto en alerta a grupos académicos, organizaciones no gubernamentales y sociedad civil de todo el mundo, para documentar los hechos, y lograr disminuir la desconexión de poblaciones en su ejercicio de libertad de expresión, en garantía de el cumplimiento de la democracia.

También te puede interesar