Cuando México fue el primer país donde se conoció en abril del 2009 la influenza AH1N1, la pasó mal. Se cayó el turismo, hubo empresas como Mexicana de Aviación que quebraron, la actividad económica tuvo mermas y la economía mexicana cayó -4.7% durante ese año. La influenza se sumó a la recesión mundial producida por la caída de Lehman Brothers, y golpeó fuerte a la economía mexicana. ¿Habremos aprendido la lección de 2009 sobre cómo atacar una epidemia como la influenza AH1N1 de aquel año?
En 2009, el gobierno terminó cancelando clases, algunas empresas cancelaron actividades, se trabajó desde casa, no se hicieron actividades al aire libre. La pregunta es si el presidente López Obrador tendría un protocolo para enfrentar una epidemia.
De hecho, fue López Obrador, en su mañanera, quien dio a conocer dos posibles brotes de coronavirus en México (luego se supo que sólo sería un caso). Y de inmediato actuó el subsecretario de Prevención de la Secretaría de Salud, Héctor López-Gatell, quien recomendó las medidas de prevención, como cualquier influenza: lavarse las manos, no saludar de mano ni de beso, tratar de evitar conglomeraciones y si se padece gripe, acudir de inmediato al doctor.
Se determinó que el gobierno de la 4T estará teniendo un vocero, José Luis Alomía, director de Epidemiología. Las medidas de prevención son positivas. Son el primer filtro para evitar la epidemia. Pero también debería existir un protocolo de pasos por si el coronavirus llegase con fuerza al país.
En el 2009 se considera que de la caída de -4.7% de la economía, un 0.7% de caída del PIB, sí se debió a la enfermedad.
Es ahí cuando el gobierno debe tener listas medidas, tanto de prevención como de actuación económica. Estamos en un verdadero cambio del sistema de salud, con la cancelación del Seguro Popular, y en ese tránsito puede venir una epidemia.
¿Estaremos preparados? A las medidas de prevención de salud y filtros de viajes procedentes de China en los aeropuertos, debemos tener los medicamentos suficientes y buena comunicación con sectores sensibles, como turismo o manufactura.
CCE ACUERDA MANTENER ABIERTA LA PETROQUÍMICA
Fue en una reunión donde estuvo presente el presidente López Obrador, quien le ha dado su lugar al Consejo Coordinador Empresarial, presidido por Carlos Salazar. Y ahí, en Palacio Nacional, los empresarios sí pidieron que no haya más incertidumbre en los proyectos donde la inversión privada puede participar en energía.
Como se lo comentábamos, ya empezaron las voces de alerta, como la de Canacintra, que señalan el posible alto costo de la energía de darse marcha atrás la Reforma Energética. La reunión de ayer en energía no fue sencilla. Ni el presidente López Obrador ni la secretaria de Energía, Rocío Nahle, quieren la Reforma Energética porque no ven resultados en la exploración de petróleo, por ejemplo. Por eso mismo continuarán las reuniones entre la IP y el gobierno para lograr un acuerdo antes del 15 de febrero.
Este artículo fue publicado en Excélsior el 23 de enero de 2020, agradecemos a José Yuste su autorización para publicarlo en nuestra página.
