lunes 20 mayo 2024

Convento de san Bartolomé, Tepetitlán, Hidalgo

por Rubén Aguilar Valenzuela

Toponimia

En su origen el pueblo en otomí se llamó “Madietexe”. El actual deriva del náhuatl tepetele (cerro) y titlán (entre), que significa “entre cerros”.

Historia

Es una fundación de la Orden de Frailes Menores (OFM) de la Provincia del Santo Evangelio. La primera evangelización estuvo a cargo de los frailes del convento de Tula. En 1571 se inicia la construcción de la iglesia y el convento con autorización del virrey don Luis de Velasco a “instancia y pedimento de los indios”. En 1585 sólo estaba terminado el primer claustro. Fray Alonso Ponce dice: “En el pueblo de Tepetitlán hay un convento de nuestra orden (San Francisco) a la advocación de San Bartolomé, en que residen dos religiosos, no tiene hecho más del primer sueldo, y así moran los frailes en una casa vieja sin iglesia, pero tienen un aposento y capilla donde guardan el santísimo sacramento y se predica a los naturales, los de aquel no son muchos y ellos y los demás de aquella presidencia son otomíes y caen en el arzobispado de México, más seguros de los chichimecas que los de Alfajayucan”. La iglesia de tres naves es anterior a 1615, dice Kubler.

La iglesia fue elegida como parroquia dependiente de la vicaría foránea de Huichapan en el año 1615, dedicada al Sagrado Corazón de Jesús. En 1698 aún subsistía el convento, según algunos autores, y Mendieta, en su Historia eclesiástica indiana, nos relata: “Fray Alonso Rangel, en lengua otomí fue el primero que la alcanzó a saber… y destruyó todos los ídolos de aquellas provincias con sus templos y altares, con muchos riesgos de su vida… Trataron muchas veces de matarlo y en dos partes lo quisieron poner por obra; la primera vez junto a un cerro de un pueblo llamado Chiapa, y la otra, cerca de otro que se llama Tepetitlán. Hay en la iglesia una imagen de El Salvador, muy venerada que se guarda en la capilla llamada de ‘El Señor de las Tres Caídas’, cuya festividad se hace el día de la trasfiguración del Señor”.

Kubler dice que “Tepetitlán es el único establecimiento religioso importante en Nueva España consagrado a este santo, que recuerda a los indígenas los ritos de Xipe Totec, San Bartolomé mártir que fue desollado como se hacía con las víctimas ofrecidas a Xipe Totec”.

Descripción

Atrio

La traza es la original y está bardeado. Tiene tres entradas. Ahora tiene un jardín que está muy bien cuidado. Hay una fuente.

Entrada al atrio por la fachada lateral

Barda con almenas

Capilla abierta

Pienso que esta fue la capilla abierta que después se cerró como una capilla. El arco que se ve a la derecha debió haber sido el frente. Es del siglo XVI.

Vista de frente de lo que pienso fue la capilla abierta que ahora está tapada. Tenía dos arcos de medio punto. Es del siglo XVI.

Iglesia

Exterior

La iglesia tiene dos fachadas: la principal corre a lo largo del muro, como se ve en la fotografía. Tiene la portada, seis ventanas, una ventana circular, un frontón de remate y la torre. Llaman la atención las dos ventanas inclinadas. Toda está pintada de amarillo colonial. La portada es muy sencilla, con un arco de medio punto enmarca en un alfiz.

Esta es la fachada lateral con tres elementos: la portada, la ventana del coro, un nicho arriba de ésta. Todo en medio de dos contrafuertes que rematan con almenas. La portada es un arco de medio punto. En la siguiente fotografía, donde está la torre, hay otro ángulo de mirada de esta fachada.

La torre de tres cuerpos debe ser del siglo XVII, cuando se le declaró parroquia. En el segundo cuerpo están las campanas.

Interior

Planta basilical de tres naves. Los techos son planos. El altar mayor es neoclásico con la imagen de san Bernardo dorada.

Entrada a la capilla que queda a mano izquierda

Murales

Están en los muros de la iglesia. Hay vestigios del siglo XVI y del siglo XIX.

En la parte exterior detrás del presbiterio está esta portada de estilo tequitqui. Ahora la entrada está tapiada.

Comentario

La forma en la que está ubicada la fachada principal de la iglesia es poco común en el siglo XVI. Es la única que conozco. La iglesia y los murales están bien conservados. La capilla abierta requiere ser restaurada. Es la primera vez que visito el lugar.  Ya no existe el convento que debió haber estado donde ahora se encuentra la casa parroquial. Hay registros de que todavía existía en 1698.

Visita

31 de octubre de 2020 con Sybille.

Fuentes consultadas

Kubler, George, Arquitectura mexicana del siglo XVI, FCE, México, 1983.

Ballesteros, Víctor M., Los conventos del estado de Hidalgo: expresiones religiosas del arte y la cultura del siglo XVI, Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo, Pachuca, 2000.

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