jueves 28 marzo 2024

AMLO con Lozoya vs. reforma: ¿quién pompó?

por José Yuste

Emilio Lozoya viene a México… y le cae como anillo al dedo al presidente López Obrador, quien, para abrir bocado, parafraseó a su paisano, el cantante Chico Che: con Lozoya sabremos “¿quién pompó reformita, quién pompó?”.

El caso Lozoya será de gran utilidad para el Presidente en momentos de crisis sanitaria y económica. Mostrará que sí había mucha corrupción en el pasado, abrirá los archivos escandalosos del sexenio de Peña Nieto y, desde luego, va contra la reforma energética, a la que el mandatario se opone. Mejor, imposible.

*

ODEBRECHT, AGRO NITROGENADOS Y FERTINAL

Emilio Lozoya, exdirector de Pemex, tiene tres expedientes de corrupción que le funcionarán al gobierno de la 4T.

El primer expediente es el de Odebrecht, la empresa brasileña que corrompió a todo el subcontinente y en México tuvo acuse de recibo a través de Emilio Lozoya, cuando todavía era coordinador internacional de la campaña presidencial de Peña Nieto. ¿Para qué habría utilizado Lozoya el dinero? Supuestamente, traería grabaciones donde se ve el soborno a los legisladores para que aprobaran la reforma energética.

El segundo caso de corrupción tiene que ver con la sobrecompra de una planta de fertilizantes. Cuando Lozoya ya fue director general de Pemex, a través de PMI Comercio Internacional, compró, con sobreprecio, Agro Nitrogenados, que pertenecía a Altos Hornos de México, de Alonso Ancira. Lozoya le compró Agro Nitrogenados en 475 millones de dólares, cuando no valía prácticamente nada.

El tercer caso de corrupción también tiene que ver con otra planta de fertilizantes, la de Fertinal, que se la compró a Fabio Covarrubias. El mismo modus operandi: un sobreprecio, pagando 635 millones de dólares, cuando valía muy poco.

*

VIDEGARAY, EL FRENO DE LOZOYA

Los tres casos, Odebrecht, Agro Nitrogenados y Fertinal, le funcionarán al actual gobierno para demostrar la corrupción que había. Pero también para ir contra el gobierno de Peña Nieto.

Emilio Lozoya Austin pertenecía al equipo cercano, técnico, de Peña Nieto. Pero se metió con quien no debía, el brazo derecho de Peña Nieto, que era Luis Videgaray. Pero, además, el exsecretario de Hacienda y luego canciller agarró a Lozoya por donde no pudo salirse: una mala gestión en Pemex.

Más allá de la corrupción, Lozoya, siendo director de Pemex, dejó de pagar a toda la cadena de proveedores del sector energético. Más de 120 mil millones de pesos frenados, que puso en jaque la cadena de valor de los hidrocarburos, prendiendo las alertas.

Luis Videgaray le puso un alto a Lozoya y su mala gestión en Pemex, tanto en la cadena de proveeduría como, suponemos, en los casos que había de corrupción. ¿Imagínese lo que Lozoya no querrá decir de Luis Videgaray?

El caso Lozoya llega a México cuando la 4T más lo necesita. Representa corrupción, casos escandalosos del pasado y mostrar que la reforma energética fue obtenida con base en dinero de Odebrecht. El presidente López Obrador ya abrió bocado con “¿quién pompó reformita, quién pompó?”.


Este artículo fue publicado en Excélsior el 15 de julio de 2020, agradecemos a José Yuste su autorización para publicarlo en nuestra página.

También te puede interesar