A decir del coordinador del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) en el Senado, Ricardo Monreal, el presidente Andrés Manuel López Obrador suavizará la retórica que ha mantenido en las últimas semanas hacia los empresarios y buscará hacer las paces con ellos.
En entrevista con El Financiero Bloomberg, señaló que en los más de 22 años que tiene de conocer al mandatario, lo ha visto modificar algunas posturas que sus detractores consideran radicales, con el fin de conciliar y buscar un entendimiento.
El senador morenista consideró que es lógico el desconcierto de algunos hombres de negocios ante los cambios de normas que la actual administración está llevando a cabo. Admitió que ha habido momentos de tensión cuando se obligó a grandes empresas a pagar impuestos atrasados; cuando se aumentaron los costos para los productores privados de electricidad y por la negativa del gobierno a elevar la deuda pública para financiar la recuperación económica de las empresas, afectadas por la crisis económica derivada de la pandemia del Covid-19.
No obstante, se dijo convencido de que esa tensión va a disminuir, aunque no aclaró qué acciones concretas llevaría a cabo López Obrador para mejorar sus relaciones con el sector privado. Consideró que esto podría producirse conforme se vayan reabriendo las actividades económicas paralizadas por la emergencia sanitaria.
Por otra parte, Monreal Ávila fue cuestionado sobre la polémica que generó su propuesta de desaparecer el IFT, la COFECE y la CRE para fusionarlos en un solo órgano regulador, con el fin de generar ahorros en el gasto público. Al respecto indicó que a fin de no ahondar más en el “escepticismo” de los empresarios hacia el gobierno, decidió postergar este proyecto y abrir una discusión pública.
En el contexto de la crisis económica por la pandemia de Covid-19, se han producido varios desencuentros entre López Obrador y líderes empresariales, quienes en repetidas ocasiones han pedido al mandatario instrumentar un plan de apoyos hacia las pequeñas y medianas empresas, las más afectadas por esta problemática. Sin embargo, el titular del Ejecutivo se ha negado al asegurar que en su administración ya no se va a rescatar a las grandes empresas como ocurría en los gobiernos anteriores y que su prioridad será a apoyar a los más pobres mediante programas sociales.
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