jueves 28 marzo 2024

Secretaría de Salud no acreditó destino de donativos de insumos para enfrentar Covid-19, revela auditoría de SFP

por etcétera

Una auditoria de la Secretaría de la Función Pública (SFP) a la Administración del Patrimonio de la Beneficencia Pública (APBP) de la Secretaría de Salud, reveló que la dependencia no ha acreditado el destino de insumos para enfrentar la emergencia sanitaria por Covid-19, que le fueron donados por particulares por un monto total de 364 millones 997 mil pesos.

Entre los artículos donados destacan mascarillas KN95, gel antibacterial, guantes, batas, trajes protectores, ventiladores, medicamentos e incluso ambulancias. De éstos, la Secretaría no aportó la documentación que compruebe cómo fueron distribuidos y cuál fue su impacto en la atención de la emergencia sanitaria.

De acuerdo con información recabada por La Silla Rota, desde el 30 de marzo de 2020 se suscribieron diversos convenios de colaboración con el Instituto de Salud para el Bienestar (INSABI) para la distribución de donaciones hechas por instituciones públicas y privadas para atender la pandemia de coronavirus, por un monto de 181 millones 164 mil 842 pesos, pero la SFP detectó que no existe soporte documental que acredite la distribución de las donaciones efectuadas a través de 14 cartas de adhesión firmadas entre mayo y noviembre de 2020.

En la auditoría también se indica que la Secretaría de Salud carece de constancias que acrediten el registro contable del destino de los insumos donados y que debieron ser entregados entre abril y noviembre de 2020 por un monto de 133 millones 263 mil pesos.

En otra de las observaciones, se establece que a pesar de la emergencia que se enfrentaba en el país por falta de insumos médicos para la atención de pandemia, la dependencia se dio el lujo de no formalizar 16 convenios para la entrega de donaciones por un monto de 44 millones 5 mil 736 pesos. Entre estos convenios que la Secretaría declinó concretar destacan los donativos de las empresas PISA, Iberdrola, Apple Inc., Fundación FCA y la Nunciatura Apostólica.

Entre los insumos que se recibieron en donación y cuyo destino a la fecha se desconoce, destacan 600 mil mascarillas KN95, 300 mil cajas del medicamento Nimbus de los laboratorios Liomont, y 19 mil cubrebocas de triple capa.

Tampoco se sabe dónde están 41 ventiladores de uso pediátrico y para adulto, así como de uso pediátrico neonatal, con un costo superior a los 48 millones de pesos; 128 monitores de signos vitales, con un costo de 37 millones de pesos y 18 ambulancias de cuidados intensivos valuadas en más de 44 millones de pesos.

Cabe mencionar que La Silla Rota también documentó con anterioridad que el INSABI recibió por parte del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) un total de 365 ventiladores, pero solo distribuyó 260. De los 105 faltantes no ha acreditado su paradero.

*arg

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