El gobierno estadounidense considera que los dictadores no deben ser invitados a la Cumbre de las Américas, respondió Karine Jean-Pierre, vocera de la Casa Blanca, a la solicitud del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, de incluirlos. Por su parte, el gobierno cubano reconoce el liderazgo del mandatario.
Después de que López Obrador declinara asistir a la reunión continental convocada por el gobierno norteamericano, Jean-Pierre fue cuestionada sobre esa decisión del mandatario mexicano, a lo que respondió categórica: “La posición principal del presidente Joe Biden es que no creemos que los dictadores deban ser invitados”.
Sin embargo, aclaró que sobre el asunto hay diversas opiniones acerca del asunto no sólo en el hemisferio, sino también en Estados Unidos. Añadió que también se mantuvieron “conversaciones francas” con el presidente mexicano y otros socios regionales acerca de las invitaciones a la cumbre.
Ante el anuncio de la ausencia de López Obrador, la vocera dijo que esperarán al secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, y dio la bienvenida “a la significativa contribución de México a los logros de la Cumbre”.
Asimismo, Jean-Pierre dijo que en julio próximo el presidente estadounidense recibirá a López Obrador y a su esposa para una reunión bilateral en la que “tendrán la oportunidad de avanzar el trabajo de la Cumbre”.
Por la mañana, en su conferencia de prensa, López Obrador informó que no asistirá a la Cumbre por la exclusión, “el querer dominar sin razón alguna, el no respetar la soberanía de los países, la independencia de cada país, y no puede haber Cumbre de las Américas si no participan todos los países del continente americano; o puede haber, pero nosotros consideramos que es seguir con la vieja política de intervencionismo, de falta de respeto a las naciones y a sus pueblos”.
También habló de la reunión que tendrá con Biden en julio próximo, en la que, dijo, tratará el tema de la integración de toda América mediante la “política de buena vecindad”, con la que se propone concretar “el sueño de Bolívar”, pero incluyendo a Estados Unidos y Canadá.
Sobre el caso de Cuba, López Obrador afirmó: “¡Cómo es que se va a mantener un bloqueo que impide que lleguen los alimentos al pueblo cubano, que impide que lleguen las medicinas! Eso es un tipo de genocidio, de tremenda violación de derechos humanos”.
Como respuesta a la postura de López Obrador, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba reconoció lo que llamó “el liderazgo” del mexicano y condenó la actitud excluyente del gobierno norteamericano para realizar una “cumbre selectiva”.
“Cuba agradece y respeta la digna, valiente y legítima posición de numerosos gobiernos en defensa de la participación de todos, en igualdad de condiciones. El liderazgo del presidente de México Andrés Manuel López Obrador merece especial reconocimiento. Destacamos la clara y temprana actitud de los países miembros de la Comunidad del Caribe (Caricom) en contra de las exclusiones, así como la firme postura del presidente de Bolivia, Luis Arce Catacora, y de la presidenta de Honduras, Xiomara Castro. La posición de Argentina como presidente (en turno) de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) expresa la opinión mayoritaria de la región en contra de una cumbre selectiva, como han expresado en público y en privado numerosos gobiernos de Sur y Centroamérica”, afirmó en su pronunciamiento el gobierno de Cuba.
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