viernes 29 marzo 2024

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por etcétera

Una nota de prensa reveló la semana pasada que desde el mes de noviembre de 2018, la Procuraduría General de la República dio por insustanciales todas sus acusaciones contra Ricardo Anaya, para entonces candidato derrotado a la Presidencia de la República.

La confesión de PGR está fechada el 28 de noviembre de 2018, dos días antes de terminar el gobierno de Enrique Peña Nieto.

El documento dice:

“No existen datos de prueba suficientes, aún de manera circunstancial, que permitan acreditar el hecho con apariencia de delito de operaciones con recursos de procedencia ilícita”.

El documento está firmado por el entonces subprocurador Especializado en Investigación de Delincuencia Organizada. Su nombre: Alonso Israel Lira Salas.

Escribe Alonso Israel Lira Salas:

“La denuncia presentada por parte de la Unidad de Inteligencia Financiera, una vez concluida la investigación, no se acreditó la ilicitud del recurso, por el contrario, se estableció la existencia de los recursos y que devienen de un crédito”.

Sigue el autodesmentido:

“Los recursos operados tienen su origen y destino en actividades lícitas, pues es claro que estos se encuentran sustentados en diversos ingresos propios de su actividad económica inmobiliaria y un crédito bancario” (Reforma, 5 de marzo 2019).

Más información: http://bit.ly/2TMXa5C

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