jueves 28 marzo 2024

Recomendamos también: Alfredo Jalife o de cómo se incubó el huevo de la serpiente, por Ramsés Ancira

por etcétera

La defensora de los derechos de la mujer y por la igualdad de género, antropóloga y catedrática emérita de la UNAM, Marta Lamas; Ángeles Mastretta escritora de Arráncame la Vida, una de las novelas mexicanas más importantes en la historia reciente de nuestro país y la brillante directora de la película Las Horas Contigo, Catalina Aguilar Mastretta, son consideradas por el evasor fiscal internacional Alfredo Jalife, como parte del “antiMéxico”.

El escritor y analista geopolítico Maruan Antaki; la activista internacional por los derechos humanos y directora de Freedom House, Mariclaire Acosta; el poeta y literato premiado nacionalmente, Javier Sicilia; el compositor Mario Lavista; la investigadora Soledad Loaeza, los galardonados escritores Xavier Velasco y Juan Villoro, forman parte, según Jalife, de este complot contra él, que en su decir revela a los enemigos de México.

Seguramente, en su mayoría, estos personajes estarían de acuerdo con la frase de Voltaire, “Puedo estar en desacuerdo con lo que dices, pero defenderé hasta la muerte tu derecho de decirlo”, sin embargo, la excepción a esta regla son los decires que, como el nazismo, el fascismo, el machismo o el estalinismo, todos los extremismos que representa Jalife, causan odio, destrucción y muerte de millones de personas.

Junto conmigo, Premio Bellas Artes de literatura testimonial Carlos Montemayor, ellas y ellos son parte del grupo de 142 personas que firmamos una carta en la que denunciamos el método Jalife para brillar en las redes sociales: infamias, insultos, amenazas, calumnias, discriminación racial y religiosa, acusaciones sin pruebas a todos sus enemigos de ser socios de cárteles, el uso faccioso de Búho Legal para hacer creer que personas homónimas, son las mismas que sus críticos más feroces.

El uso de verdades a medias para construir calumnias completas, los juegos de palabras de doble sentido (tal vez para encubrir su propia y negada homosexualidad; sus complejos por problemas de esterilidad, o quizá, para curarse en salud ante la investigación de la Unidad de Inteligencia Financiera, por transferir fondos al extranjero) son parte del método Jalife.

Un buen porcentaje de este grupo de firmantes votó por López Obrador por considerar que representaba una alternativa de cambio real. El tiempo dirá si la decisión fue acertada, pero Jalife se escuda en el político tabasqueño para difundir la sensación de que se le atacaba por sus preferencias políticas y no por el discurso misógino, mismo que ha provocado la resolución a la causa 43/2018 del decimocuarto Tribunal Colegiado en Materia Administrativa. En esta se ordena a la Universidad Nacional Autónoma de México aplicar el protocolo de violencia de género por la afectación que sufrieron estudiantes de esta casa de estudios.

Más información: http://bit.ly/2DZuIEj

También te puede interesar