jueves 28 marzo 2024

Promesas e intercambio de acusaciones entre candidatos presidenciales en el #DebateINE

por etcétera

El primer debate entre los candidatos a la Presidencia de la República inició con el tema de la seguridad y la violencia, en el cual los candidatos Ricardo Anaya, José Antonio Meade y Jaime Rodríguez Calderón hicieron señalamientos a la propuesta de amnistía de Andrés Manuel López Obrador.

El candidato independiente, Jaime Rodríguez Calderón, señaló que su experiencia como víctima de la delincuencia le indica que tiene que rediseñarse la estrategia contra la seguridad y para ello, dijo, seleccionará a los mejores hombres y mujeres para realizar una nueva, porque “un presidente no es Santa Claus ni Superman para poder con todo”, aseguró.

Entre sus propuestas, destacó una reforma de las corporaciones policiales y rechazó las prácticas asistencialistas de regalar dinero como fórmula para evitar que los jóvenes sean reclutados por la delincuencia y se pronunció por las academias militarizadas, que ya existen en Nuevo León y “los chavos están muy contentos”. A los delincuentes no hay que perdonarlos sino encarcelarlos, apuntó.

Andrés Manuel López Obrador, aspirante de la coalición Juntos Haremos Historia, señaló que la propuesta de amnistía no quiere decir impunidad, sino un cambio radical en la estrategia que han seguido los gobiernos del PRI y el PAN e insistió que no se debe combatir fuego con más fuego y aseguró que como Jefe de Gobierno tuvo una experiencia exitosa en la disminución de la delincuencia; tan sólo en los secuestros, sostuvo, éstos bajaron en un 38%.

Cuestionado respecto a si su plan de amnistía incluye a los grupos de la delincuencia organizada, agregó que “al triunfo de su movimiento” convocará a un gran foro con expertos, e incluso al Papa Francisco para que con su mediación contribuya a la pacificación del país. Dijo que deben atenderse, ante todo, las causas de la violencia que se encuentran – según su diagnóstico – en la falta de empleo, crecimiento económico y oportunidades, especialmente hacia los jóvenes por parte de los gobiernos neoliberales.

Ricardo Anaya, de la coalición Por México al Frente,  fustigó los pactos con la delincuencia y dijo que esa estrategia ya fue probada en otros países Colombia sin éxito, ya que aumentó la violencia. Se pronunció por una fiscalía independiente y un desmantelamiento de los carteles de la delincuencia organizada y no sólo la captura de sus líderes.

Planteó también que por medio de la tecnología se haga un mejoramiento sustancial de los trabajos de inteligencia dentro de las corporaciones policiacas, mismas que deberán ser reforzadas y profesionalizadas. Mientras este proceso se efectúa, el Ejército se mantendrá en las calles el tiempo que sea necesario.

Por su parte, José Antonio Meade, aspirante de la alianza Todos por México, acusó a López Obrador de ser un aliado de los grupos delincuenciales, a quienes quiere perdonar, y se comprometió a aplicar el Estado de Derecho. En consecuencia, los criminales estarían en la cárcel.  Se dijo a favor de la Ley de Seguridad Interior como un instrumento para dar certidumbre a las Fuerzas Armadas, a quienes –en efecto– se les ha demandado un esfuerzo más allá de sus funciones establecidas en la ley. Sin embargo, con esta norma, los cuerpos castrenses y la ciudadanía, tendrán claridad sobre el porqué y el cuánto tiempo va a permanecer el Ejército en alguna región.

Consideró que legalizar las drogas es una solución engañosa, y  focalizar el combate a la violencia en ese tema es una visión reduccionista, ya que hay otros tipos de delitos que también deben enfrentarse como el huachicoleo, el secuestro y los homicidios, entre otros. Ofreció un fortalecimiento de las corporaciones de seguridad y justicia.

A su vez, Margarita Zavala, aspirante independiente, defendió la estrategia aplicada en el sexenio de Felipe Calderón y la justificó con el hecho de que fue una medida necesaria ante la omisión de los gobiernos anteriores con los grupos de la delincuencia organizada. Se hizo lo que se pudo, con lo que se tenía, adujo.

Cuestionó que en el actual gobierno se haya desaparecido la Secretaría de Seguridad Pública, la cual ofreció restaurar; y se comprometió a mejorar las policías en sus condiciones de trabajo y equipo. Asimismo, priorizará el combate al feminicidio y trata de personas y subrayó la necesidad de inculcar  valores y protección a la familia.

En el segundo bloque, dedicado al tema del combate a la corrupción, José Antonio Meade, propuso que los funcionarios, empezando por el Presidente, no tengan fuero y que presenten su declaración #7de7. Cuestionado sobre los escándalos de la corrupción de la actual administración, dijo que como secretario de Hacienda, contribuyó a que en casos como los de Roberto Borge y Javier Duarte, se aplicara la ley. Acusó a López Obrador de tener tres departamentos que no reconoce.

Jaime Rodríguez Calderón, afirmó que propondrá al Congreso de la Unión una iniciativa donde se establezca que se le corte la mano a quienes incurran en actos de corrupción; a pregunta de la moderadora Azucena Uresti si era literal si planteamiento, el aspirante contestó afirmativamente. Defendió la legitimidad de su candidatura y dijo que demostrará al INE que no violó la ley en la recolección de sus firmas.

En su intervención, Andrés Manuel López Obrador afirmó que su gobierno se acabará con la corrupción, terminando con los privilegios dentro del gobierno, y reiteró sus promesas de rebajar los sueldos de los altos funcionarios y vender el avión presidencial.  Sostuvo que “la mafia del poder” se roba 500 mil millones de pesos al año. Se dijo convencido de que si el presidente es honesto y predican con el ejemplo, también los funcionarios y gobernadores lo serán.  En torno al señalamiento de Meade sobre los tres departamentos, respondió que si demuestran que los tiene, se los regalará a su contrincante.

Margarita Zavala dijo que la corrupción no se acaba por decreto, sino con un combate efectivo a la impunidad con instituciones y leyes y fuertes. En este sentido, se pronunció por una fiscalía autónoma a nivel nacional y una en cada estado del país. Ofreció ser “implacable” con los corruptos.

Ricardo Anaya también se manifestó por instituciones autónomas que investiguen y sancionen los casos de corrupción, y planteó cárcel e inhabilitación vitalicia a los funcionarios a quienes se les demuestre su responsabilidad en un caso de esta naturaleza; respecto a las acusaciones en su contra por una presunta triangulación de recursos, sostuvo que no hay ninguna acusación legal en su contra y se trató de caso mediático en que las instituciones como la PGR fueron usadas para perjudicarlo, y de ahí la importancia de darles autonomía.

En último apartado, donde se habló sobre democracia, pluralismo y grupos vulnerables, Margarita Zavala se comprometió a hacer una evaluación permanente de sus compromisos de gobierno, pero por medio de mecanismos establecidos en la ley. Respecto al matrimonio igualitario, reiteró que ella, en lo personal, está a favor de la unión entre hombre y mujer, sin embargo, dijo que será respetuosa de las libertades de todas las personas.

Para José Antonio Meade, la única forma de llevar un control sobre el cumplimiento de las promesas de campaña por medio del Poder Legislativo, pues en él se deliberan los instrumentos y se aprueban los recursos para su aplicación. Consideró que no será necesario un observatorio ciudadano, ya que las ONG que actualmente existen hacen un trabajo cotidiano de evaluación de los gobiernos. Asimismo, prometió una amplia política social dirigida a niños y otros grupos en condición vulnerable.

Andrés Manuel López Obrador insistió en su propuesta de someter su gobierno a revocación del mandato cada dos años; dijo creer en la democracia, y por ello, ofreció aceptar una hipotética derrota en la elección, siempre y cuando no haya fraude, compra de votos ni intervención de los gobiernos en los comicios.

Ricardo Anaya reconoció la gran desigualdad que actualmente existe en el país con muchos sectores con los que se tiene una deuda histórica, que su gobierno saldará con políticas diseñadas con el apoyo de la sociedad civil. Dijo que sólo estará de acuerdo con una revocación del mandato bien reglamentada en la ley y no por medio de asambleas a mano alzada, un mecanismo que consideró tramposo e instrumentado por gobiernos dictatoriales. También se comprometió con la libertad de prensa.

Jaime Rodríguez consideró que la raíz de todos los males del país está en la partidocracia, y por ello, conminó a sus contendientes a sumarse a la idea de renunciar al financiamiento de campañas con recursos públicos. Reclamó la inequidad para  los aspirantes independientes.

arg

 

También te puede interesar