Diversas instituciones y organizaciones internacionales manifestaron su condena por el asesinato del periodista Heber López Vásquez, perpetrado el pasado jueves en Salina Cruz, Oaxaca, y llamaron a hacer justicia en ese y otros casos.
El representante de la Oficina en México del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH), Jesús Peña, condenó el crimen, el que “pone de manifiesto la vulnerabilidad en la que se encuentran quienes ejercen la actividad periodística lejos de los centros urbanos más grandes. Es fundamental que autoridades y sociedad respalden la imprescindible actividad periodística que permite que todas las personas tengamos acceso a información plural”.
Peña añadió que con el homicidio de López Vásquez no sólo se acalla una voz, “sino que atemoriza a todas las personas que ejercen el periodismo en la región del Istmo de Tehuantepec. Es necesario reaccionar frente a este terrible acto y garantizar condiciones para que las y los periodistas no se pregunten antes de publicar una nota si esas palabras pueden ser el detonante de una amenaza o una agresión”.
También destacó que la detención de dos personas relacionadas con el crimen puede significar un avance importante, pero que la investigación del caso debe ser realizada con los más altos estándares y debe tomar en cuenta la línea de investigación de la labor periodística de López Vásquez.
La Embajada de Canadá en México, además de enviar condolencias a los familiares de López Vásquez, expresó: “La violencia contra los periodistas es inaceptable. Su contribución es esencial para salvaguardar democracias transparencias y abiertas”.
Jorge Canahuati, presidente de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), dijo que se trata de un hecho aberrante, y añadió sobre México: “Este nuevo crimen, el quinto en las últimas semanas, nos llena de impotencia. No sabemos ya de qué forma pedir al gobierno que administre justicia y tome medidas para prevenir la violencia contra el periodismo”.
La SIP, que se dijo alarmada por la situación en México, destacó en un comunicado la impunidad en los casos de asesinatos de periodistas, así como el discurso estigmatizante del presidente Andrés Manuel López Obrador contra la prensa, aspectos que “lastran a México a ser uno de los peores países en materia de libertad de prensa en las Américas”.
Reporteros Sin Fronteras condenó el crimen y recordó que el periodista había sido amenazado en 2019 por escoltas del alcalde de Salina Cruz por haber denunciado irregularidades de la administración. Solicitó a la Fiscalía General del Estado de Oaxaca investigar lo ocurrido tomando como línea de investigación el trabajo periodístico del occiso, además de garantizar la seguridad de su familia.
El Comité para la Protección de los Periodistas urgió a las autoridades mexicanas para realizar investigaciones transparentes y creíbles de los homicidios contra los periodistas asesinados en México, y mencionó: “Más de 90% de los asesinatos de periodistas en México quedan impunes”.
La Federación Internacional de Periodistas consideró una triste noticia el homicidio del periodista mexicano, y cuestionó: “¿Quién ordenó su muerte? Esta escalada de asesinatos debe parar. Urgimos a realizar una investigación completa sobre este crimen”.
El Instituto Internacional de Prensa consideró que con el de López Vásquez continúa la avalancha de asesinatos de periodistas en México, por lo que llamó a las autoridades a brindar justicia a las víctimas y a sus familias.
