El secretario de Relaciones Exteriores, Luis Videgaray, aseguró que el acompañamiento que el gobierno de México dará a la denominada Caravana Migrante, estará en todo momento apegado a la Constitución y a la legislación internacional y serán respetados los derechos humanos de quienes la conforman.
En entrevista con Ciro Gómez Leyva, para Radio Fórmula, el canciller descartó la presentación de una alguna nota diplomática al gobierno de Estados Unidos por el tono de los mensajes del presidente de aquel país, Donald Trump, que exigió a México frenar a los migrantes y evitar “una amenaza” a su territorio. Consideró que las declaraciones del mandatario estadounidense fueron hechas en un contexto electoral y no tiene caso entrar una confrontación innecesaria.
No obstante, afirmó que con motivo de la visita a México del Secretario de Estado de EU, Mike Pompeo, tratará este asunto personalmente con él y le dejará en claro la posición del gobierno mexicano respecto al tránsito de los migrantes centroamericanos y a la seguridad fronteriza.
Videgaray Caso negó las versiones periodísticas que aluden a supuestas condiciones impuestas del gobierno de Estados Unidos a México para firmar el nuevo acuerdo comercial, a cambio de “controlar” el éxodo de los migrantes de Centroamérica para que no ingresen al vecino país. “Es absolutamente falso que México sea el muro de contención de Estados Unidos”, aseguró.
Respecto a las medidas que el gobierno de México tendrá hacia quienes integran la Caravana Migrante, reiteró que tal y como se expuso de manera conjunta con la Secretaría de Gobernación, los ciudadanos de los países hermanos de Centroamérica podrán pasar libremente siempre y cuando tengan sus documentos en regla; en caso de no ser así, tendrán la opción de presentar una solicitud de refugio, para lo cual deberán reunir los requisitos que establece la ley.
Quienes no estén en ninguno de los casos anteriores, serán resguardados en refugios especiales a fin de evitar que sean reclutados por organizaciones criminales o víctimas de tratantes de personas, hasta que se cumplan los trámites para ser deportados a sus países de origen. Detalló que se hizo una solicitud formal de apoyo a la ONU para atender las solicitudes de refugio que ya empezaron a generarse, así como para que asista a las autoridades mexicanas en el proceso de acompañamiento a esta caravana.
A pregunta expresa sobre si ha tratado este asunto con el equipo de Andrés Manuel López Obrador para tomar decisiones conjuntas, el canciller afirmó que hasta el 30 de noviembre la responsabilidad de gobierno es exclusiva de Enrique Peña Nieto y será su administración la que resuelva y responda. No obstante, aclaró que mantiene una buena comunicación con Marcelo Ebrard, quien lo sucederá en el cargo y confió en que el proceso de transición concluya en buenos términos.
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