El jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Miguel Ángel Mancera, se dijo listo para el escrutinio público tras cinco años de gestión; se dijo convencido de que en la política se debe superar el debate de las izquierdas y las derechas para la construcción de un proyecto ciudadano en donde tengan cabida todos los sectores, más allá de cualquier ideología.
Al rendir su Quinto Informe de Gobierno, el mandatario local defendió sus decisiones gobierno y sostuvo que éstas no se tomaron con base en “cálculos políticos” sino con la convicción de que eran necesarias para enfrentar problemas que demandaban una solución de fondo que por mucho tiempo se pospuso.
De esta forma, Mancera se refirió a los cuestionamientos recibidos por el alza a la tarifa del Metro, el Hoy No Circula, la inseguridad y su relación con el Gobierno Federal entre otros temas. Afirmó que cada uno de ellos tiene múltiples causas y niveles de responsabilidad para su atención y su administración – apuntó – ha hecho lo que le corresponde. No obstante, reconoció que aún hay muchos pendientes por resolver y todo programa o proyecto, puede mejorarse.
“No soy perfecto, pero en el defecto de lo humano construyo la superación para servir mejor. En estos cinco años de labor se han corregido muchos errores del pasado, se ha puesto el derecho de las personas por encima de los privilegios de las clases. Esta no es una ciudad de favoritos, es una ciudad de mujeres y hombres libres, espacio de inclusión, de convivencia, de amplitud”, enfatizó.
Al evento asistieron ocho gobernadores; el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, quien acudió con la representación presidencial, así como los dirigentes nacionales del PAN, Ricardo Anaya; del PRD, Alejandra Barrales y de Movimiento Ciudadano, Dante Delgado, a quienes Mancera agradeció su presencia, al igual que a sus colaboradores, especialmente aquellos que, según el mandatario, lo han acompañado “lealmente y sin dobles intenciones”.
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