Como respuesta a los dicterios que el presidente Andrés Manuel López Obrador ha proferido en los últimos días por el caso de su hijo José Ramón, Carlos Loret de Mola dijo que sus calumnias e insultos no cambian los hechos, y que no ha desmentido “una sola palabra del reportaje”.
En la emisión 70 de Latinus, Loret de Mola contestó las diatribas que López Obrador le ha dedicado a Latinus y a Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad por el reportaje sobre las lujosas casonas que ha habitado en los últimos años su hijo, José Ramón López Beltrán, y su pareja, Carolyn Adams Solano.
“Esta semana hemos atestiguado en el presidente un nivel de odio y de agresión que no habíamos visto antes. No podemos quedarnos en silencio y contribuir a normalizar la violencia con la que el presidente habla de cualquier persona que exponga con imágenes, con documentos, con investigación periodística cualquier cosa que exhiba o incomode a su gobierno”, afirmó el periodista.
Loret de Mola recordó que documentaron un conflicto de interés que lleva a una sospecha de corrupción en la que está vinculada la familia del presidente, además de mostrar el estilo de vida de su vástago, “que choca con el discurso presidencial de que el que no es austero es corrupto, que criminaliza cualquier aspiración de tener una vida mejor”.
Recordó los hechos documentados: que López Beltrán y Adams Solano (que durante años ha trabajado como cabildera de compañías petroleras “a las que el presidente considera corruptas y abusivas”) ocuparon una lujosa casa de uno de los presidentes de una compañía con contratos vigentes por más de 151 millones de dólares con el gobierno de López Obrador, lo que admitió la propia Baker Hughes.
Frente a esos hechos, la respuesta del presidente “ha sido un incesante y creciente ataque verbal”, expresó Loret de Mola, que a continuación dijo que no se trata del “derecho de réplica” que suele argüir López Obrador.
“Derecho de réplica es contestar ‘esa casa no es de mi hijo’, ‘esa alberca no está allí, no tiene cine privado’, ‘mi hijo no maneja una camioneta Mercedes’, ‘la casa no era de un alto ejecutivo de una empresa petrolera’, ‘a esa petrolera no le hemos dado millones de dólares en contratos’. Eso es derecho de réplica: responder con datos, con documentos, con imágenes. Nada de eso ha hecho el presidente de México. No ha cuestionado ni desmentido una sola palabra del reportaje”, afirmó Loret de Mola.
El periodista aclaró que “por más insultos que acumule” el presidente López Obrador, esos hechos no van a cambiar, ni sus discursos de austeridad y de condena al que quiere vivir mejor ni su pretensión de ser el paladín de la honestidad ni los insultos que profiere contra el periodismo van a cambiar los hechos que hemos documentado sobre sus hermanos Pío y Martín, su prima Felipa, Bartlett y tantos más”.
Sobre la estrategia de López Obrador contra comunicadores, el comunicador dijo que inició como una estrategia de acoso en redes sociales, para después convertirse en calumnias emitidas por el propio presidente, y que ahora “ya vamos en los francos insultos que lanza el presidente de México desde la más poderosa tribuna del país. ¿Qué sigue? Esta semana, desde Palacio Nacional, un día, y al día siguiente y al otro también, Andrés Manuel López Obrador fue escalando en injurias, iba sumando calumnias e insultos contra los periodistas que presentamos reportajes sobre las casas en las que vive su hijo José Ramón en Houston”.
Mencionó que los ataques reciente de López Obrador contra los comunicadores ocurren “en un mes que ha roto los récords de periodistas asesinados; la violencia contra la prensa está peor que nunca ahorita, en estos días, y sin ningún respeto a esas vidas perdidas, pasando por encima de ese hecho indigno, el presidente sólo se ocupa de transmitir palabras de venganza. Ese es el presidente que dice respetar la libertad de expresión; ese es el presidente que dice que es demócrata”.
Pero advirtió que los ataques de López Obrador no los amedrentarán: “Sus desplantes autoritarios aquí se van a topar con investigaciones, con documentos, con videos, porque, aunque no le guste, vamos a ejercer la libertad de expresión al costo que sea porque estos ataques van mucho más allá de nosotros, muchos más allá de mí”.
Como toda contrarréplica, en su conferencia de prensa de este viernes López Obrador sólo atino a balbucear que Loret de Mola es “un calumniador profesional”. Porque él lo dice, y nada más.
