A los elevados índices inflacionarios, el pobre crecimiento económico de este primer trimestre y la contracción del 2020, su suma otro indicador preocupante que muestra el mal desempeño de la economía durante la actual administración: la caída de 19.89% de la inversión privada en 2020, el peor desplome en 25 años.
Aunque el presidente Andrés Manuel López Obrador culpó del mínimo crecimiento del primer trimestre a “la pandemia”, lo cierto es que mientras México creció 0.4%, Estados Unidos, país aún más afectado por la pandemia, creció en el mismo periodo más de 6%.
Ahora, este 13 de mayo, el INEGI informa que la inversión privada en 2020 tuvo una grave caída, sólo superada por la registrada en 1995, año de recesión mundial.
El rubro es nombrado como Formación Bruta de Capital Fijo Privada, y durante el año pasado cayó en México 19.89%, año en que se dieron cierres masivos de pequeñas y medianas empresas, al tiempo que el gobierno inyectaba enormes recursos a obras públicas como el Aeropuerto Felipe Ángeles, el Tren Maya y la Refinería dos Bocas.
La caída de la inversión privada en 2020 se puede explicar en parte por la desconfianza generada tras la cancelación del Aeropuerto de Texcoco y el hecho de que la obra que lo sustituyó, el Aeropuerto en la Base Militar de Santa Lucía, se concedió de manera preferente a la Secretaría de la Defensa Nacional.
Según el INEGI, la caída en la inversión durante 2020 no inició con la pandemia y los confinamientos, pero sí se agravó. El retroceso venía gestándose desde 2018, justamente el año en que Andrés Manuel López Obrador ganó la presidencia, tomó posesión y ordenó, como una de sus primera medidas, cancelar la magna obra en Texcoco.
Para mediados de 2018, que era ya seguro que ganaría el morenista, los inversionistas empezaron a ser más cautos al invertir en México.
Y, según las acciones que sigue tomando el gobierno, el panorama no es halagador, ya que las (por ahora) suspendidas Ley de la Industria Eléctrica y Ley de Hidrocarburos impactan directamente sobre las inversiones privadas en rubros tan relevantes como la producción eléctrica y la de combustibles. De hecho, industriales norteamericanos ya han exigido a su gobierno que negocie con dureza con la administración de AMLO para que se respeten sus acuerdos bilaterales.
Según el INEGI, todo el 2019 fue de caídas consecutivas en la inversión, y el acumulado de pérdida de dicho año fue de 3.38%.
Igualmente fue con el 2020: trimestre por trimestre, el instituto estuvo informando de los desplomes en la inversión y este día informó sobre el análisis global del año.
Ahora, el análisis de 2020 muestra que el país se encuentra en su nivel más bajo de inversión privada desde hace 25 años, lo cual impacta directamente en la creación de empleos, recaudación fiscal y por ende, servicios y obra pública.
