El expresidente Carlos Salinas, promotor y arquitecto central del acuerdo firmado en 1993, señaló hoy que hasta “el innombrable” (en referencia a Andrés Manuel López Obrador), ha dicho que se debe defender el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) con Estados Unidos y Canadá.
El exmandatario presentó su libro Aliados y Adversarios, TLCAN 1988-2017, acompañado de Herminio Blanco Mendoza, quien fuera funcionario de alto nivel de su gabinete y jefe del equipo negociador del tratado, a finales de los ochenta y principios de los noventa.
“Cito en el prólogo del libro dos declaraciones; una del dirigente del PRD, de hace dos meses, quien dice literalmente: ‘nos equivocamos al oponernos al Tratado de Libre Comercio en su inicio, hoy es un momento de defenderlo'”, explicó Salinas de Gortari.
Y la otra declaración, agregó, “de hace dos semanas; no voy a decir por quién porque es el innombrable quien declaró, pero cito: ‘el Tratado de Libre Comercio debemos de defenderlo‘”.
El 18 de agosto pasado, López Obrador declaró que no le conviene a México entrar a una renegociación del Tratado de Libre Comercio con Enrique Peña, por ser un “presidente débil”: “Nos conviene que se espere la negociación a que haya un presidente electo: Hay que cuidar esa negociación“, subrayó.
Carlos Salinas comentó además que los estadounidenses tendrán que aceptar que la relación con México es con reglas y no con desplantes personales o caprichos. Afirmó que México es la solución, no el problema de Estados Unidos.
Durante su exposición, hizo notar que en la actualidad la renegociación del tratado con Estados Unidos y Canadá se da en una nueva realidad adversa, de acoso, que arranca con la elección de Donald Trump en la presidencia de Estados Unidos. “Hoy tenemos una nueva realidad, la realidad del acoso ante un evento inesperado y que ha resultado adverso”.
Sostuvo que han vuelto los viejos estereotipos de autoridades estadounidenses hacía México, y lo hacen “con un lenguaje inaceptable y el intento de construir un muro para separar dos naciones, cuyas relaciones históricas hacen imposible que en los hechos tenga viabilidad” esa pretensión.
Sostuvo que la nueva actitud adversa de la contraparte en la renegociación, es decir Donald Trump, requerirá de un talento extraordinario y un profundo nacionalismo para enfrentar. “La idea de cancelar el tratado no tiene justificación”, concluyó Salinas de Gortari.
(Con información de El Universal)
aml
