Adán Augusto López Hernández, gobernador de Tabasco, anunció que compró boletos para la rifa del avión presidencial por un valor de 100 mil pesos.
Durante una gira de trabajo, el titular de Ejecutivo estatal dijo lo siguiente sobre los boletos de lotería: “Compré algunos y los voy a regalar. Invertí como 100 mil pesos. Son ustedes (los periodistas) a los primeros que les digo que les voy a regalar. Les voy a obsequiar uno la próxima semana con la promesa de que donarán el 50 por ciento al Ayuntamiento de Centro. Ya les vamos a decir para qué lo van a usar”.
López Hernández comentó que este sábado entregará los boletos si acuden a un acto, que ahí los van a regalar y que “hasta a Evaristo (Hernández, alcalde del municipio de Centro) le va a tocar”.
Cuando al gobernador morenista se le refirió que sindicatos como el de los trabajadores petroleros regalan boletos a sus miembros, afirmó ser respetuoso de ello, que todos tienen derecho a adquirirlos y regalarlos: “Pues cualquiera; yo compré algunos y también los voy a regalar. Pues invertí como, creo que 100 mil pesos, más o menos”.
Lo que no aclaró el gobernador es si la cantidad que invirtió en boletos para el sorteo que se realizará el próximo 15 de septiembre salió de sus propios recursos o si provino del erario.
Esto ocurre mientras organismos como el Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores y Petróleos Mexicanos invitan a sus empleados a que adquieran boletos para el citado sorteo.
Apenas el pasado lunes fue difundido un spot en el que el presidente Andrés Manuel López Obrador promovió la rifa como si se tratara de la aeronave y no de lo que serán premios en dinero: “Este avión lo vamos a rifar el 15 de septiembre y lo que se obtenga se va a utilizar para comprar equipo médico y atender al pueblo. Compra tu cachito”.
