El pleno de la Cámara de Diputados aprobó en lo particular la Ley de Seguridad Interior con 214 votos a favor, 101 en contra y cuatro abstenciones, tras desechar sin discutir las 101 reservas que legisladores habían hecho al dictamen; de ese modo, el instrumento se turnó al Senado para continuar su trámite legislativo.
En un hecho poco común, la mayoría legislativa que apoyaba el dictamen fue desechando una a una, mediante votaciones particulares y sin discutir, las 101 reservas que diversos legisladores de oposición habían hecho al dictamen durante su aprobación general.
aml