lunes 18 marzo 2024

“Cuenta hasta 10”, propuesta del gobierno para terminar con violencia hacia las mujeres; campaña carece de perspectiva de género: especialistas

por etcétera

Con el lema “Cuenta hasta diez”, el Gobierno de México presentó los carteles y promocionales de la campaña que lanzará como parte de la estrategia para erradicar la violencia hacia las mujeres.

Con el mismo título y una narrativa similar a la que tuvo una campaña que se lanzó a finales del 80 contra el maltrato infantil, en los spots se sugiere a los ciudadanos sacar la “bandera blanca de la paz”  y contar hasta diez para guardar la calma e inhibir así cualquier acto de agresión.

“Para que la violencia no te gane, respira y cuenta hasta 10”; “No pierdas la paciencia, respira y cuenta hasta 10”; “Antes de enojarte con tu pareja, respira y cuenta hasta 10”; “No te desesperes, respira y cuenta hasta 10”, son algunas de las frases que se mencionan dentro de las cápsulas.

En el marco del informe mensual del Grupo Interinstitucional de Estrategias contra las Violencias de Género, la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, reconoció que el confinamiento por la pandemia del coronavirus ha incrementado el riesgo de violencia hacia las mujeres dentro sus hogares. No obstante, sostuvo que el gobierno federal tiene el propósito de combatir este flagelo a través de la “innovación” y la cooperación entre las instituciones y niveles de gobierno.

De acuerdo con información de El Economista, el portavoz de la Presidencia de la República, Jesús Ramírez Cuevas, señaló que la violencia de género es un fenómeno multifactorial y según dijo, la campaña busca erradicarla desde el núcleo familiar. Desde su punto de vista, contar hasta diez es un método antiguo pero eficaz para evitar que los ánimos se desborden.

“Es una campaña hablando de las realidades y que intenta dar algunas pequeñas herramientas a los ciudadanos para impedir que ocurra o termine lo que está sucediendo, la violencia contra las mujeres, por eso este asunto de visibilizar los momentos de tensión familiar, de tensión entre padres e hijos y también entre la pareja y buscar un espacio para detenerse, respirar y de alguna manera contar hasta 10, recurriendo a este método antiguo, pero muy sabio y eficaz para contener las actitudes impulsivas o las pasiones que se desbordan”, sostuvo.

En la campaña se pide a la población comunicarse al 911 para reportar cualquier situación de riesgo, esto a pesar de que en días pasados, el presidente de México Andrés Manuel López Obrador aseguró que la mayoría de las llamadas a este servicio eran falsas.

Por su parte, el secretario Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, Leonel Cota Montaño, dio a conocer que entre enero y abril de este año se han recibido en el 911, alrededor de 22 millones 805 mil 882 llamadas. De éstas, dijo, sólo el 23%  que equivalen a 5 millones 451 mil 567 llamadas fueron efectivas. Y a su vez,  por hechos de violencia contra la mujer fueron procedentes 7.38%, esto es 403 mil llamadas.

En redes sociales, la campaña ha recibido serias críticas por parte de  activistas, diputadas y periodistas. Consideran que carece de perspectiva  de género además de está basada en estereotipos que refuerzan la cultura machista.

La diputada de Movimiento Ciudadano, Martha Tagle, señaló que aun cuando el gobierno tiene todo para diseñar políticas públicas para prevenir, atender y sancionar la violencia contra las mujeres,  falta voluntad, compromiso y visión.

“Ya conté del 1 al 1000… y me sigue ganando el enojo y la frustración.  Hay tantas mujeres en medio de la violencia que están esperando de quienes estamos en decisiones públicas, actuemos para cambiar su situación, y les piden contar del 1 al 10, respirar y esperar…”, manifestó en uno de sus tuits.

La activista María Salguero, autora del Mapa Nacional de Feminicidios, cuestionó: No manches, CONAPO. ¿Quién les hizo la campaña? ¿Un hombre?  Asimismo, consideró que al gobierno le hace falta asesoría en temas de género.

El periodista Víctor Trujillo, señaló que la campaña se quedó anclada en el pasado y sólo falta que aparezca Topo Gigio en las “mañaneras” del presidente.

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