El presidente Andrés Manuel López Obrador no es liberal, aunque él se autodefina como tal, señaló el historiador Enrique Krauze, quien consideró que en su discurso y sus acciones el mandatario es absolutamente conservador y se está acercando a una tradición autoritaria.
En entrevista con Ciro Gómez Leyva para Radio Fórmula, el también ensayista y escritor, se refirió a las expresiones que López Obrador hizo hacia su persona el pasado fin de semana, donde lo catalogó como representante del conservadurismo y lo comparó con Lucas Alamán. Sostuvo que tal y como se lo manifestó al presidente vía Twitter, es él quien tiene más semejanzas con este personaje de la historia, por ejemplo en la línea de concentrar el poder en una persona.
Explicó que los liberales en la historia han buscado terminar con los caudillos y las monarquías, mientras que los conservadores alientan los gobiernos de un solo hombre; los liberales respetan la independencia de los otros poderes como el Legislativo y el Judicial y fomentan con ellos el debate y la deliberación, mientras que los conservadores los someten.
Luego entonces, López Obrador al buscar centralizar el poder en su persona y convertir al Poder Legislativo en un apéndice de su gobierno y sugerir al Poder Judicial las decisiones que debe tomar, es un conservador que no tolera las voces distintas y pretende en forma sutil o manifiesta, exponerlas al denuesto y el escarnio, apuntó.
Respecto a la situación en Jalisco y su mensaje que escribió sobre el gobernador de aquella entidad, Enrique Alfaro, Krauze señaló que más allá de los hechos de abuso policial que deberán ser debidamente esclarecidos y sancionados, es evidente la campaña de acoso que desde el gobierno federal se hizo en contra del mandatario estatal, la cual viene de más atrás y el caso de Giovanni solo fue el detonante para intensificarla. Y ante lo delicado que esto resulta, consideró que era necesario advertirlo.
Señaló que sin ánimo de seguir abonando a la polarización social que prevalece en el país, no se puede desestimar lo expresado por el presidente cuando plantea esa disyuntiva de si se está a favor o en contra de la “transformación” que él cree representar. Abundó que expresiones de esa naturaleza sólo las han hecho personajes que a la postre se eternizaron en el poder como Fidel Castro. Y en ese sentido, admitió que él no quisiera un régimen de estas características para México.
El historiador expuso que la coyuntura que actualmente enfrenta México es sumamente compleja, pues la emergencia sanitaria por coronavirus está lejos de quedar superada y la crisis económica como consecuencia de lo anterior, está dejando a mucha gente en la incertidumbre por la falta de empleo y de expectativas.
Por lo tanto, es momento de que el presidente López Obrador deje de sembrar la discordia entre los mexicanos y lo llamó a hacer a un lado el discurso de odio y convocar a la unidad, porque de otra forma, será mucho más difícil salir adelante de esta desgracia en que está inmersa el país.
arg
