Después de que Ricardo Anaya denunciara que el presidente quiere meterlo a la cárcel, Andrés Manuel López Obrador lo negó y lo invitó a no huir y a defenderse. Pero ante las acusaciones que diversos personajes de oposición están enfrentando, la alianza política Va Por México exigió al gobierno federal que detenga su acoso y persecución.
Después de que Anaya denunció la persecución política que sufre por parte del gobierno de López Obrador, en su cuenta de Facebook el presidente rechazó la acusación y reviró que si Anaya es inocente, que no huya y que presente pruebas. Y añadió que ahora no hay presos políticos, aunque sí puede haber políticos presos.
“No tengo nada que ver con la persecución que supone Ricardo Anaya. No es mi fuerte la venganza. Si la Fiscalía y el Poder Judicial lo acusan de corrupción y es inocente, que no se ampare ni huya; que se defienda con pruebas y con la fuerza de la verdad. Ya no es el tiempo de antes: puede haber políticos presos pero no presos políticos”, escribió el presidente.
En ocasión de la reunión de los partidos Revolucionario Institucional (PRI), Acción Nacional (AN) y de la Revolución Democrática (PRD) en la Cámara de Diputados, dirigentes mencionaron casos como los del diputado local perredista por Veracruz Rogelio Franco Castán, quien está preso; el priista Ildefonso Guajardo Villarreal, diputado federal electo por Nuevo León; el gobernador panista de Tamaulipas, Francisco Javier García Cabeza de Vaca, y Ricardo Anaya, quien fue candidato presidencial en 2018.
Marko Cortés, dirigente nacional panista, afirmó que mediante la persecución el gobierno federal busca amedrentar a los opositores, frente a lo cual no pueden permanecer callados. Por ello dijo lo siguiente a los legisladores electos de Va Por México: “Hagamos que valga la pena: que no nos doblen, que no nos toquen ni con el dulce ni con el garrote; que nos mantengamos duros, firmes, propositivos, constructivos. Hagamos entonces que este pasaje en la historia de México sea el que salvó a este gran país de una dictadura, de una tiranía y de una regresión que puede costar muchísimo”.
Para Alejandro Moreno, presidente del PRI, los legisladores de la alianza están obligados a defender las instituciones y las libertades, además de mantener el bienestar y mejorar los estándares de vida.
En su turno, Jesús Zambrano, presidente nacional del PRD, dijo que la persecución política del gobierno federal se da mientras este procura un acercamiento entre el gobierno de Nicolás Maduro y sus opositores. Ironizó sobre esa situación: “¿Tendrá que haber un país amigo para que reúna al gobierno mexicano y a la oposición para que tengan diálogo?”.
“Nos quieren en los hechos llevar a un régimen autocrático de corte dictatorial, y de ahí, como ya lo estamos viendo, en el paso hacia la persecución política de los opositores no es cosa de centímetros”, afirmó.
El perredista añadió que en la próxima legislatura estarán en juego la democracia, la estabilidad y el futuro del país, por lo que llamó a evitar la imposición de un régimen autoritario.
La diputada priista Blanca Alcalá manifestó su solidaridad con los políticos acusados por el gobierno federal, y dijo que la alianza debe trabajar para constituir un bloque opositor que evite las persecuciones políticas.
