Según el Cardenal Emérito de Guadalajara, Juan Sandoval Íñiguez, el aborto es un crimen que se comete con la misma “barbaridad” con la que los narcotraficantes ejecutan a sus víctimas.
En el marco de una misa celebrada este domingo en el Estadio Azul en la Ciudad de México, el prelado aseguró que la violencia que ejerce el crimen organizada es el “castigo” de Dios por el “pecado” del aborto. Agregó que al igual que los grupos delictivos descuartizan a las personas, se destroza a los fetos y se sacrifica a inocentes por medio de la interrupción del embarazo. Calificó como “alevosas y criminales” las leyes que avalan esta práctica.
Asimismo, el jerarca católico consideró que la llamada “ideología de género” es un “paquete de perversiones” impuesto desde el extranjero, que atenta contra la familia con el fin de “arruinar y subyugar a los pueblos”.
Tras pedir perdón por los agravios cometidos en nombre del aborto, la ideología de género, la corrupción y la violencia, Sandoval Íñiguez insinuó ante los asistentes que los sismos de septiembre pasado pueden interpretarse como “un castigo divino”. Fustigó a quienes califican las enseñanzas de la Iglesia como medievales.
Diversos grupos religiosos convocaron el domingo a un celebración eucarística “de desagravio”, en la que algunas personas se autoflagelaron hasta sangrar.
(Con información de El Universal y La Jornada)
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