Twitter anunció hoy la suspensión temporal del proceso con el que verifican las cuentas de sus usuarios, argumentado que el sistema necesita ser reparado.
La decisión fue tomada después de que la red social fuera duramente criticada esta semana por verificar la cuenta de Jason Kessler, uno de los organizadores del mitin de los supremacistas blancos que en agosto pasado dejó tres muertos en Charlottesville, Virgina, Estados Unidos.
La empresa indicó a través de un tuit en su cuenta de soporte que “la verificación tenía como objetivo autentificar la identidad y voz, pero es interpretada como un respaldo o un indicador de importancia. Reconocemos que creamos esta confusión y necesitamos resolverla. Hemos pausado todas las verificaciones en general mientras trabajamos e informaremos pronto de nuevo”.
Por su parte, Jack Dorsey, presidente ejecutivo de la red social, intervino diciendo que el equipo de gestión debió comunicar más velozmente sus planes de reparar el sistema.
“Deberíamos haber comunicado más rápido esto”, señaló en su cuenta de Twitter. “Nuestros agentes siguieron nuestra política de verificación correctamente, pero nos dimos cuenta hace algún tiempo que el sistema no funciona y debe reconsiderarse. Fallamos al no hacer nada al respecto”.
Después de lo ocurrido en Charlottesville, Kessler usó su cuenta de microblogging para llamar a Heather Heyer, una de sus víctimas, “una comunista gorda y repugnante”.
Hasta el momento la plataforma no ha dicho cuando se restablecerá el proceso de verificación.
ess
