A mediados de abril, el director estaba en el escenario de Star Wars Celebration, la convención que se realizó en Chicago, frente a un mar de fanáticos que tenían sus teléfonos móviles enfocados en él; algunos también enarbolaban sables de luz. A la izquierda de Abrams estaba Kathleen Kennedy, la presidenta de Lucasfilm. Y a la derecha del cineasta estaba el comediante y conductor Stephen Colbert, quien estaba intentando —en su modalidad de entrevistador sobreactuado— que Abrams o Kennedy revelaran algún detalle de la próxima película, Star Wars: El ascenso de Skywalker.
“Les diré que el filme no empieza justo después de que terminó la última”, dijo Abrams, pensando mucho cada palabra. “Ha pasado algo de tiempo”.
En otros ámbitos esa respuesta habría sido considerada evasiva y extremadamente parca. Pero cuando se trata del ambiente previo a un estreno de La guerra de las galaxias, cuando escasea la información y la que está disponible se controla hasta en el más mínimo detalle, lo que dijo Abrams fue casi una revelación (“Ah, ya veo”, le dijo Colbert después de que dio otra respuesta vaga. “Me pidieron que viniera a Chicago a hacer preguntas, no a conseguir respuestas”).
El ascenso de Skywalker, dirigida por Abrams y cuyo estreno en cines está planificado para el 20 de diciembre, dará cierre a la trilogía que empezó en 2015 con El despertar de la fuerza (también dirigida por Abrams) y que siguió en 2017 con Los últimos jedi, de Rian Johnson. También finalizará la saga Skywalker, los nueve filmes que incluyen la trilogía original, las precuelas estrenadas a partir de 1999 y las nuevas películas, que retoman la trama unos treinta años después de lo sucedido en el episodio VI.
Entonces, ¿qué podemos esperar de la próxima entrega? Aunque existe poca información, sí sabemos algunos detalles y podemos formular algunas hipótesis.
Los héroes
Cuando terminó Los últimos jedi, Finn (John Boyega), el soldado stormtrooper que se convirtió en un luchador rebelde, se reencontró con la jedi en potencia Rey (Daisy Ridley). Los dos habían pasado casi toda la película separados; Finn y el piloto Poe (Oscar Isaac) unieron fuerzas para proteger a los integrantes de la Resistencia de la malvada Primera Orden mientras que Rey intentaba presionar a Luke Skywalker (Mark Hamill) —quien apareció como un ser irascible que se encontraba exiliado en un planeta remoto— para que los ayudara a enfrentarse al lado oscuro.
La nueva película tendrá más escenas con los protagonistas interactuando en un mismo lugar. En Star Wars Celebration, Abrams presentó el filme como “una aventura a la que van en grupo”. Es posible que también veamos a Rey siendo tentada por el lado oscuro, una posibilidad sugerida en un video que se lanzó este agosto. Rey aparece brevemente con un sable de luz de doble hoja y de color rojo:
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