jueves 28 marzo 2024

“Ya cumplí la misión que me impuse. He visto a otros desfilar esposados (…) no tengo por qué sufrir circos”: Alan García, en carta previo a su suicidio

por etcétera

El expresidente peruano Alan García dejó una carta antes de suicidarse, según leyó su hija Luciana García Nores este viernes, previo a que el féretro con los restos del ex mandatario sea conducido a un cementerio privado de Lima donde serán cremados.

De acuerdo con el reporte de EFE, en una misiva redactada en tercera persona, García Pérez aseguró que ya había cumplido su misión de existencia con Perú, por lo que no tenía por qué sufrir injusticias ni circos.

“He visto a otros desfilar esposados, guardando su miserable existencia, pero Alan García no tiene porqué sufrir esas injusticias y circos, por eso le dejo a mis hijos la dignidad de mis decisiones, a mis compañeros una señal de orgullo y mi cadáver como una muestra de mi desprecio hacia mis adversarios, porque ya cumplí la misión que me impuse”, escribió.

Señaló que el haber gobernado Perú en dos ocasiones (1985-1990 y 2006-2011) fue “la misión” de su existencia y que por ese motivo sus adversarios “portaron por la estrategia” de denunciarlo durante más de 30 años, pero “jamás encontraron nada”.

“En este tiempo de rumores y odios repetidos que las mayorías creen verdad he visto cómo se utilizan los procedimientos para humillar o vejar y no para encontrar verdades.

“Por muchos años me situé por sobre los insultos, me defendí y el homenaje de mis enemigos fue argumentar que Alan García era suficientemente inteligente como para que ellos no pudieran probar sus calumnias”, agregó.

También escribió que “no hubo ni habrá cuentas, ni sobornos, ni riqueza, la historia tiene más valor que cualquier riqueza material.

“Nunca podría haber precio suficiente para quebrar mi orgullo de aprista y de peruano, por eso repetí otros se venden, yo no”, dice la misiva leída por su hija.

Previo a su suicidio, el ex presidente de Perú también indicó que cumplió con su deber en la política y en las obras hechas durante sus mandatos en favor del pueblo, alcanzando “metas que otros países o gobierno no han logrado”.

Finalmente enunció que “no tengo porque aceptar vejámenes” y pidió “que Dios, al que voy con dignidad, proteja a los de buen corazón y los más humildes”.

Alan García murió en un hospital de Lima la mañana del miércoles tras dispararse en la cabeza horas antes cuando iba a ser detenido por una orden judicial por supuestos delitos de corrupción vinculados al caso Odebrecht.

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