Almohada
El sol casi siempre me recibe ausente, con el carcomer dado por la amabilidad de lo posible, la reciente oscuridad me aturde, casi llevándome al colapso, su claridad me recibe
El sol casi siempre me recibe ausente, con el carcomer dado por la amabilidad de lo posible, la reciente oscuridad me aturde, casi llevándome al colapso, su claridad me recibe
Cuando me extravío en la cocina, no regreso a los paraísos perdidos, los lazos entre mi cuello y mis manos, impiden el naufragio, hay veces en que no los encuentro,
En el dulzor amargo de la palma, me persigue cierta brisa de naturaleza recordatoria, una sinfonía extraña recorre el cansancio de la clarividencia matutina, me llena de imágenes abstraídas del
Ayer, antes de dormir, me mentí; dije no extrañar las alturas con su vértigo, sin vacilar, respondí que la rotación no duele, cuando observé el baile, me dije que no
Desandar suele ser tedioso; cuando se hace, se experimentan olvidos, olvidados, de las filmaciones de ella habitando el piano, con su voz limpia, de agua clara. Desandar suele ser espuma,
Cuando iba en el metro, pensaba en ti, en tus versos, en tus ojos.
En la medianía del horizonte, encuentro gigantes dormidos; comienzo a darles forma, se tergiversan, se destruyen, así evitando la catarsis vespertina, al detenerse la destrucción, me ataca la amnesia, olvido
A mi familia, mi otra familia. Hoy les contaré una historia, una historia de amor, de neblina; hace un tiempo, un grupo de amigos compartía sus sueños, entre risas construyeron
No despierto soñando el regreso, sé que la reversa se olvida, o al menos, cesa el dolor; senderos luminosos alcanzan la vuelta de la esquina, transito hacia ellos, sin temor
Escribí tu nombre en una hoja de papel, cuidadosamente la doblé; hice un pequeño avión con ella, le hice volar a través de la ventana, quedó entre los cables de
Para César El mundo siempre fue nuestro, lo caminamos, disfrutando cada paso que dimos, las cervezas no nos faltaron, tampoco la metáfora de una cuba libre, mucho menos caídas, salíamos
Al despertar me invade, lo que no había sido sol, el pesar en los parpados explota con el frenesí de los pájaros, pero respiro la madera, sus comienzos de bosque
El anuncio de que la superestrella de la música planea competir por la presidencia de los Estados Unidos no debe tomarse a la ligera o como una más de sus
Noche inalcanzable, has que conserve su recuerdo, sus leves ojos color de Cedro, la inconclusa bondad de su voz; te pido las conserves, otros amaneceres me conducirán a la amnesia,
Las hojas del exterior se trenzan en un tango, predestinado a la catástrofe, se elevan, cortan a la mitad los rabos de nube, descienden y rozan la noche, liviana entre
Te levantas, a las seis de la mañana, te entra una pesadez que cala hasta los huesos; enciendes el televisor y ves un acróbata en el circo; le ves
Te has extraviado entre el sol y la arena; supongo que las curvas o los labios te han embriagado, dejaste de necesitar el ron para ausentarte del turquesa; pero que
Previo a comer, la veo, le preparo el desayuno, el café, incluso saco su cenicero al balcón, su perfume me embriaga, me trae de vuelta al ron, donde si está,
“Para El Mar” Volando en mi habitación; repaso mi vida (?) paso a paso, mar a mar, confuso, entre oscuridades, humos y (errores), repaso a las musas que me han
He abrazado tantos brazos, como se me ha permitido, he escuchado tantas voces, como se me ha permitido, he escuchado revoluciones y cambios, relatados con tanto fervor, que la revolución